El ex presidente Eduardo Duhalde ratificó este martes sus polémicos dichos respecto a la posibilidad de un Golpe de Estado en Argentina y aseguró que los dirigentes políticos “no se dan cuenta de lo que está pasando con la sociedad pobre y con las clases medias que se desmoronan".
“Se están dando las condiciones y si nos seguimos peleando vamos hacia un proceso anárquico en la Argentina, yo lo viví en el 76", expuso Duhalde.
Al ser consultado sobre sus dichos, explicó en diálogo con Radio 10: " Digo lo que pienso y creo tener fundamentos para hacerlo. No nos damos cuenta que mientras algunos comemos todos los días lo que está pasando en la sociedad pobre y en las clases medias que se desmoronan".
Al tiempo que el ex jefe de Estado consideró que “estamos viviendo un momento pre-anárquico”.
"En 2001 la sociedad no se desbarrancó no porque yo goberné, sino porque yo formé un cogobierno", aseguró, en tanto que insistió: "Estoy convencido de que hay que gobernar juntos".
“Tengo el derecho y la obligación de avisarle a los argentinos que tenemos que juntarnos. No todos son enemigos. Están en otra posición en la que no concuerdo. ¿Se creen que no hablé esto con Alberto (Fernández)? Los que se fueron del partido tienen derecho a irse porque estamos en democracia. Hablo con todos y sé que están convencidos de que hay que juntarse”, expresó en Radio 10.
El pasado lunes Eduardo Duhalde desató una polémica al asegurar que "es ridículo que piensen que el año que viene va a haber elecciones" porque Argentina es "campeona de las dictaduras mundiales".
"La gente no lo sabe, no lo lee, o se olvida, pero entre el 30 y el 83 hemos tenido 14 dictaduras militares. Quien ignore hoy que el militarismo se está poniendo nuevamente de pie en América no conoce lo que está pasando", había expresado en declaraciones televisivas.
Y había agregado: "No se puede seguir así, para que haya elecciones tienen que ser consensuadas y borrar estas cosas que no sirven para nada que van por el camino opuesto de los consensos y los acuerdos".
Las declaraciones del ex mandatario generaron un amplio repudio entre los dirigentes del oficialismo y los referentes de las organizaciones de derechos humanos.