El Centro de Economía Política (Cepa) acaba de publicar un documento titulado “Estrategias de ingresos ante la crisis económica. Relevamiento sobre grupos de trueque en ferias territoriales y redes sociales al primer cuatrimestre de 2019” en el que expone las opciones, siempre precarias y en franca expansión, que las familias buscan, inventan y autogestionan para sobrevivir a una recesión que parece infinita, situación alarmante que ciertos actores del mercado y la política (e incluso la academia) insisten en llamar (y hasta financiar): emprendedores. Por Valentín Ibarra, para AIM.
En la primera parte de 2019 la economía argentina se encuentra atravesando una fuerte crisis socioeconómica, con una tasa de desocupación que superó los dos dígitos en la última medición del primer trimestre de 2019, ubicándose en 10,1 por ciento. Este es el valor más alto en 13 años (…), en este escenario las mujeres jóvenes son las más perjudicadas, alcanzando en ese segmento de población, un 23 por ciento de desocupación. Adicionalmente, la pérdida de poder adquisitivo de los salarios que se sostiene en 19 meses consecutivos expone la emergencia de los trabajadores pobres. En este contexto, las ferias (y en muchos casos las plazas públicas) son ocupadas por grupos de nuevos desocupados/as, amas de casa, jubilados/as y pensionados/as, o simplemente trabajadores y trabajadoras que no llegan a fin de mes y buscan una salida a sus problemas económicos.
El Cepa realizó las siguientes preguntas antes de llevar a cabo el relevamiento y posterior informe: ¿Qué características tienen las y los trabajadores que crecientemente participan en ferias? ¿Cuáles son las modalidades que adquiere el intercambio en la actualidad? - Para responder estas preguntas, durante el primer cuatrimestre del 2019, se realizó una encuesta en cuatro ferias populares: la Feria del Barrio Independencia (José León Suárez), la Feria del Parque Patricios (Caba), la Feria de Mataderos (Caba) y la Feria de Florencio Varela (Zona sur). Se hicieron una serie de consultas a los y las feriantes, manteros y vendedores ambulantes a partir de una encuesta estructurada y de manera presencial. Por otro lado, se realizó un relevamiento de grupos de Facebook de intercambio y compra-venta localizados en la Ciudad de Buenos Aires y el GBA, entre los meses de mayo y junio del corriente.
El 49 por ciento de las respuestas indicó que su participación en alguna feria remite a más de tres años. Pero el resto, el otro 49 por ciento, hace menos de tres años que se considera feriante. A menos de tres años, el 31 por ciento indicó que el plazo desde cuando participa es menor al año y un ocho por ciento de los encuestados expresó que era la primera vez que realizaban este trabajo.
Respecto de la razón por la que trabaja en la feria, sólo 13 por ciento indicó que es porque gana bien o le gusta (por ello denominamos a la categoría “feriante no demandante”), el 33 por ciento de los que se desempeñan actualmente como feriantes están al mismo tiempo en búsqueda de otro trabajo como reemplazo (pero no consiguen) y fueron denominados “feriantes demandantes”, mientras que el 52 por ciento se dedicó a ser feriante de manera transitoria, con distintos lapsos de antigüedad pero siempre menores a tres años, debido a la crisis laboral actual. Al interior de las respuestas enmarcadas en la crisis laboral, el 85 por ciento de los encuestados (un 44 por ciento del total general) indicó contar con otra fuente de ingresos, pero la misma al resultarles insuficiente los obliga a recurrir a la feria como complemento de esos ingresos. Adicionalmente, el 15 por ciento (ocho por ciento del total general) recurrió a las ferias porque perdió el trabajo.
Con respecto a la composición según género de las y los feriantes, se puede observar que la amplia mayoría son mujeres (69 por ciento), los varones representan 30 por ciento y hay un uno por ciento de feriantes de transgénero. La composición protagónica de mujeres abre la puerta para problematizar, en el futuro, la enorme importancia de la organización de las mujeres, tendiendo lazos de solidaridad en contextos de crisis económica para sortear la sustentabilidad social, situación que ya se evidenció en la crisis del 2001.
Intercambios de compra-venta y trueque en redes sociales
Un relevamiento propio realizado en la red social Facebook entre el 27 de mayo y el 7 de junio de 2019, registramos 48 grupos públicos de compra-venta o trueque con más de 1.000 participantes. La mayoría fueron creados en 2017 y registran una relevante cantidad de publicaciones diarias.
Las publicaciones y miembros en los últimos 30 días (entre el 7 de mayo y el 7 de junio) muestran que el método de trueque y distintos tipos de intercambio en la red social Facebook está en auge.
Las redes sociales generaron nuevas dinámicas para el intercambio no sólo con grupos de Facebook, sino también de whastapp. Cada uno de los integrantes sube fotos y notas sobre los productos o servicios que ofrece o demanda y espera que aparezca algún/a interesado/a que responda. Los encuentros de intercambio se realizan o bien de manera privada (concretando un encuentro, en general en algún lugar concurrido como una plaza o estación de tren) o en algunos grupos muy numerosos se pacta una fecha periódicamente en algún espacio público donde todos los integrantes pueden asistir, realizar intercambios pre-acordados o nuevos. Los grupos tienen reglas claras en tanto a los intercambios permitidos, horarios y productos. Tanto en los grupos de Facebook como de whatsapp existe un administrador (la persona que creo el grupo o alguien designado por esta) que monitorea el cumplimiento de las reglas y la incorporación de nuevos integrantes.
Los grupos de intercambio de Facebook tienen en su portada una síntesis de reglas o pautas de funcionamiento, a partir de las que se indican las condiciones en las cuales se deben realizar los intercambios. Un punto importante es, si se aceptan o no intercambios por dinero (algunos grupos son de trueque puro y en otros se acepta la compra-venta de productos). Se indica claramente el tipo de productos que están permitidos (nuevos o usados). Se puede ver una captura de pantalla de la portada de “TRUEQUE!! sin dinero solo x alimentos!!” (un grupo muy numeroso con más de 77.000 integrantes). En el mismo se indica que el grupo sólo permite los intercambios sin dinero y están excluidos productos como alcohol, medicamentos, celulares y tablets. Esto último excluye del grupo la reventa de productos robados o contrabando. Es un grupo que los integrantes utilizan como herramienta de subsistencia por fuera de los intercambios monetarios.
Los grupos de Whatsapp, por su parte, son utilizados para crear grupos de trueque y/o compraventa. A diferencia de los grupos de Facebook, que pueden ser masivos, whatsapp sólo permite un máximo de 500 miembros. Además, son grupos privados (por esta razón no es posible relevar la magnitud en términos cuantitativos que tienen) y la forma en la que las personas van agregando participantes es primeramente a sus conocidos y estos a otros allegados como una especie de red.
A continuación compartimos el documento fuente a fin de dejar al lector la opción de realizar sus propias conclusiones y nuevas preguntas: https://gallery.mailchimp.com/e9c6f62a4dc825f6a9dab4e88/files/1450cd11-9ee5-4c6d-8768-f74df2652092/2019.07.22_Estrategias_de_ingresos_ante_la_crisis_econ%C3%B3mica._Relevamiento_de_ferias_CEPA.pdf