En la sesión de la semana pasada, la Cámara de Diputados aprobó por 246 votos afirmativos y dos negativos la reforma al régimen de promoción establecido por la Ley 27.506, impulsada por Alberto Fernández, que viene a reemplazar a una norma lanzada durante la gestión macrista. ¿Cuáles son los principales cambios?
Según pudo saber AIM, el proyecto modifica varios aspectos del artículo cuatro de la 27.506, respecto de los requisitos para ingresar al régimen de promoción:
-A fin de facilitar la inscripción de MiPymes, rebaja la exigencia de acreditar exportaciones (fija un piso especial del cuatro por ciento microempresas y del 10 para Pymes, manteniéndolo en el 13 por ciento para las grandes empresas), del monto de inversión en I+D (que si bien se mantiene en el tres por ciento para grandes empresas, será del uno y dos por ciento, respectivamente, para Micro y Pymes), y del correspondiente a capacitación de personal (que irá del uno por ciento, al dos y al cinco en función de dicha escala, cuando antes era del ocho por ciento para todos los casos).
-Elimina la posibilidad de ingreso para las empresas nuevas, o aquellas que, al momento de solicitar la inscripción en el registro, no cuenten con facturación.
-Incorpora la exigencia de estar al día en materia fiscal, laboral, gremial y previsional.
Según pudo saber AIM, la iniciativa se aprobó con 246 votos a favor y dos en contra, contando con los antecedentes de la Ley de Promoción de la Industria del Software en 2004 y con la primera Ley de Economía del Conocimiento sancionada en 2019.
La economía del conocimiento transforma la información para producir valor y conocimiento que puede ser exportado o aplicado en la industria local. Engloba una amplia cantidad de sectores, entre ellos representa una gran oportunidad para el sector agroindustrial y tecnológico. Además de un impulso a las Pymes.
El presidente de la Comisión de Comunicaciones e Informatica, Pablo Carro (Todos-Córdoba), destacó el “triángulo virtuoso entre el conocimiento, la ciencia y la tecnología” que se da a partir de esta ley, beneficia centralmente a las micro, pequeñas y medianas empresa de todo el país ya que “tiene una impronta inclusiva, federal y prevé la creación de un fondo fiduciario de promoción específica al sector de las pymes”, explicó.
Por su parte, el diputado integrante de la Comisión, Javier Campos (CC ARI-Buenos Aires), destacó la creación de empleo a futuro y lo que representaría la baja de impuestos para sectores estratégicos como por ejemplo la biotecnología, la agroindustria y las manufacturas argentinas.
Mientras tanto, la diputada Claudia Márquez (Córdoba-Córdoba Federal) hizo énfasis en el valor que aporta esta ley para impulsar la competitividad y el agregado de valor de todos los sectores, incluidos los mas tradicionales como la producción agropecuaria que se ve enriquecida de las apptech y de la consolidación de la industria 4.0.