Desde el comienzo de la pandemia, dados los obstáculos generales para continuar con las tareas de investigación en el marco de medidas gubernamentales de aislamiento y distanciamiento obligatorios, y una multiplicación inmensa de las tareas docentes y de cuidado, las organizaciones gremiales “venimos reclamando prórrogas para todas las becas activas, por la misma duración de la crisis socio-sanitaria”, expresaron a AIM desde Jóvenes Científicos Precarizados (JCP).
A duras penas y tras inmensas peleas gremiales, el directorio de Conicet había dado breves prórrogas excepcionales y subsidios, y un año de prórrogas genuinas a dos únicas camadas de becarios doctorales. Mientras tanto, las becas posdoctorales quedaban rezagadas, ajustadas a la misma duración de siempre, y las nuevas convocatorias de posdoc y Carrera de Investigador Científico (CIC) dejaban a cantidades enormes de postulantes en la calle.
El día de hoy, el directorio de Conicet salió anunciar como concesión excepcional el otorgamiento de prórrogas de becas posdoctorales adjudicándolas a la crisis, pero “en realidad se trata en la mayoría de los casos de las mismas prórrogas que otorgaban todos los años a la espera de los resultados de las convocatorias de CIC”, aclararon desde la JCP a AIM.
En ese sentido, especificaron: las becas posdoctorales empiezan en abril de un año n y finalizan en marzo del año próximo, pero desde hace muchos años que esas becas se prorrogan por otro período más:
-a quienes se postulen a CIC, hasta el momento del año n+3 en el que se publiquen los resultados de esa convocatoria;
-a quienes no se postulen a CIC, hasta el momento del año n+2 en el que se cierre la convocatoria a CIC.
Por ende, de acuerdo con el anuncio de hoy, las tres camadas incluidas en el comunicado del directorio recibirían idéntico tratamiento:
-para quienes se postulen a CIC en el año n+2, pasa lo mismo que siempre (solo que a una parte de la prórroga otorgada siempre ahora se la considera prórroga por covid);
-para quienes no se postulen a CIC en el año n+2, la beca, en lugar de terminarse en el momento de cierre de la convocatoria a CIC, se termina en marzo del año n+3, unos meses después. Este contingente de becarios serían los únicos que obtienen una prórroga distinta de las que se dieron todos los años.
En tal sentido, el nuevo anuncio del directorio “no hace nada por la continuidad laboral de les becarios posdoctorales frente a los efectos perjudiciales de la pandemia sobre sus condiciones de trabajo y el desarrollo de sus planes de investigación. Apenas oficializa un procedimiento establecido para todos les postulantes a CIC, y otorga a quienes no se postulen unos meses más de beca que -excepto que se modifique sustancialmente el calendario- no les permiten presentarse con beca a la convocatoria de CIC del año posterior”.
Desde JCP, “volvemos a señalar que la sustentabilidad del sistema público de investigación requiere de la prórroga automática de todas las becas activas por toda la duración de la crisis socio-sanitaria, así como de licencias y prórrogas efectivas para quienes tienen hijos o adultos a cargo. Basta de anuncios engañosos y concesiones falsas”, advirtieron a AIM.