La ministra de Salud, Sonia Velásquez, brindó un informe en la Cámara de Diputados sobre el plan de vacunación llevado adelante contra el Covid-19 en la provincia y se amparó en las leyes de Habeas data y de protección de los pacientes para evitar develar la lista de funcionarios y familiares de políticos vacunados sin ser personas de riesgo. La oposición advirtió que la violación de los Protocolos deslegitima el plan del gobierno, registró AIM.

La ministra de salud fue interpelada con su equipo en el recinto de la Cámara Baja. La jornada comenzó con un informe detallado sobre las pautas para la distribución y aplicación de las vacunas contra el Covid-19.

En ese marco, la oposición cuestionó la arbitrariedad del Estado al vacunar a funcionarios y familiares de políticos contra el Covid-19 en Entre Ríos. Fue Gustavo Cusinato (UCR) quien advirtió que “el Protocolo fue violado”, al haber beneficiados funcionarios del gobierno provincial y empleados con relación política e indicó que los privilegios “afectan la credibilidad” del plan provincial de vacunación.

En ese sentido, Velázquez afirmó: “No somos ajenos a la situación de las picardías y aprovechadas en este contexto de pandemia a nivel de tipo político y partidario. En el ministerio no estamos con especulaciones e instancias que no sea otra de cumplimentar una política sanitaria para todos y todas las enterrianas”. Sin embargo, la ministra no dio nombres, ya que se amparó en la normativa vigente para proteger a los vacunados VIP en Entre Ríos: “Quienes trabajamos en salud desde hace muchos años tenemos una Ley de derechos del paciente y de protección de datos; por lo que tenemos el derecho de proteger la información del sistema de datos que comprende a las personas vacunadas como con otras prácticas”.

Por otro lado la ministra aclaró que no se respondieron los pedidos de informe de los legisladores opositores porque que “no llegaron por cuestiones burocráticas”, y dijo que hubo un problema en la comunicación pública sobre la difusión de datos de cómos e manejó la vacunación.

“Siempre vamos a tener nuestras debilidades y fortalezas; las fortalezas son nuestros mecanismos de monitoreo para desarrollar, lo más transparente posible, una campaña sin presentes en este país y en la historia mundial”, remarcó.

Además, precisó que hay más de 1.100 vacunadores y el gobierno tiene una responsabilidad normativa y de gobernanza: “Fuimos siempre transparentes y, a veces, trabajar con el virus encendido en una pandemia, la verdad, que interpela la cuestión de la previsibilidad porque el error humano siempre estará presente”.