La nueva audiencia del juicio contra los médicos acusados de participar en la causa del hijo varón de los desaparecidos Raquel Negro y Tulio Valenzuela, aportó nuevos datos sobre el paradero del hermano de Sabrina Valenzuela Negro, supo AIM. Una enfermera del IPP vinculó a los acusados en la participación de los hechos y deslizó la posibilidad de que el Melli pudiera estar en Córdoba.
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Stella Maris Cuatrin, ex enfermera del IPP, aseguró que los mellizos Valenzuela fueron atendidos por los médicos del IPP en la sala de neonatología y mencionó específicamente a los acusados Rossi, Schroeder y Torrealday.
Sofía Uranga, abogada querellante, informó a AIM que además se pidió instrucción de una causa por falso testimonio contra Marta Ofelia Gómez, otra de las enfermeras que habría anotado el ingreso de López, NN, o sea el hermano mellizo que hoy se encuentra desaparecido.
“Gómez aseveró que ella trabajó hasta diciembre de 1977 y lo sostuvo en la testimonial de hoy. Se le dijo que hay dos pruebas que podrían indicar lo contrario, como la del registro de remuneraciones del IPP, donde figura que cobró (haberes) hasta septiembre de 1978; o la de la pericia caligráfica que determinó que ella había inscripto registros de alta de historias clínicas entre el 10 de marzo al 30 de julio de 1978”, explicó la abogada.
No obstante, la enfermera aseguró que no mintió en su declaración, y que la caligrafía de la letra donde se registra el nacimiento del mellizo desaparecido no es suya.
“Le preguntamos si no estaba confundida de mes, porque nos dijo que el servicio de neonatología comenzó a funcionar en abril de 1977, y que ella trabajó hasta diciembre. No obstante, el primer paciente registrado en el área data de octubre. Y ella dijo que si sobre algo no estaba confundida era acerca del mes y el año en que dejó de trabajar en el lugar. Entonces, de acuerdo a las pruebas que la contradijeron, pedimos que se instruya una causa por falso testimonio”, informó Uranga.
Por otra parte, Stella Maris Cuatrín, quien habría inscripto en ingreso de Sabrina Valenzuela Negro (con el nombre de Soledad López), tampoco reconoció su caligrafía en los registros constatados. “Se le preguntaron varias cosas y han quedado muchas dudas que nos indican que está faltando a la verdad o bien no recuerda que era su letra. Además, sabemos que tuvo una reunión informal con Sabrina Valenzuela, luego de su testimonial del 10 de agosto. Le preguntamos por eso y negó haber dado otros datos al margen de lo que había declarado, lo que llevó a un careo entre Valenzuela Negro y Cuatrín, ya que Valenzuela aseguró que, durante el encuentro informal entre ambas, la enfermera le habría dicho que el Melli podría ser un médico residente en la provincia de Córdoba. Finalmente, Cuatrin admitió los dichos a Sabrina. “Además, dijo que Torrealday (uno de los acusados), su hermana y su madre iban a Córdoba porque allí tenían un chalet, como vinculando este hecho al supuesto paradero del Melli”, dijo Urganga. Durante el careo, Cuatrín se mostró nerviosa al punto que debió ser contenida por Sabrina Valenzuela.
A partir de la jornada, se abrió una nueva línea de investigación que involucró a nuevos testigos. “La jornada fue movilizante porque por primera vez se abrió una posibilidad de averiguar dónde se habría ido el Melli. Lo único que sabíamos era que el IPP tenía relación con un sanatorio llamado Halac, llamado así por Jacobo Halac, un pediatra formado en Estados Unidos que trajo las primeras neonatologías a la Argentina”, explicó Uranga respecto del instituto donde se formaron profesionalmente los acusados.
Por último, la abogada informó que el lunes tendrá lugar una nueva audiencia el lunes a las 8.30 donde se completarán las testimoniales que siguen para continuar posteriormente con los alegatos del juicio contra los médicos Miguel Torrealday, David Vainstub y Jorge Rossi. A los profesionales se los acusa de retención y ocultamiento de menores y supresión de estado civil (conocido como robo de bebés y sustitución de identidad) .