En la biblioteca provincial de Entre Ríos, Anabel Rostan lanzó su primer libro: Una noche en el bosque. “La idea es acercar a los niños a la lectura, para alentar la imaginación”, afirmó a AIM la comunicadora social.
Una noche en el bosque es producto de un largo camino de la comunicadora social, quien desde pequeña participó de talleres de escritura. La elaboración del cuento infantil, que cuenta con ilustraciones de Jaimo, con el diseño gráfico de Jor Rodríguez, “fue una hermosa experiencia y muy emocionante”, aseguró.
La idea “surgió hace unos cuantos años, pero primero se hicieron los personajes, porque los protagonistas de la historia son un castor y un topo”, recordó y explicó: “Casto Castor y Luis Topo nacieron en una reunión con amigos con quienes empezamos a hablar y a mí se me ocurrió el caso de un castor cubano, me parecía a ese nombre para hacer un cuento o un proyecto y, después, pasaron los días y meses y se me empezaron a ocurrir diferentes ideas”
“Después tuve una historia suelta que escribí en ese momento, pero el cuento me llevó un tiempo armado hasta que lo terminé. No fue todo de un momento para el otro, sino que lo escribí, lo reescribí varias veces y lo mostré para que lo vean”, apuntó.
El libro –financiado por el Fondo Económico de Incentivo a la Cultura, las Artes y la Ciencia de Paraná (Feicac)- es producto de un trayecto que Rostan realizó con Jaimo y Rodríguez: “Analizamos si hacer un corto, pero después surgió la convocatoria del Feicac y le pregunté a Jaimo si podía realizar los dibujos para un libro infantil y si iba a tener tiempo para hacerlo, y lo presentamos y nos enteramos de que habíamos quedado. Desde ahí empezamos a analizar cómo empezar, por dónde, y luego nos acordamos de cómo habíamos trabajado cuando estábamos en Tapabocas (que es un espacio de taller) y comenzamos a reunirnos y a trabajar de modo virtual y a realizar pruebas, lo que nos llevó un largo proceso”.
El texto es infantil “porque la idea es acercar a los niños a la lectura, para alentar la imaginación”, precisó Rostan, quien adelantó que “hay otros cuentos breves, otras historias que después de ellas nos gustaría poder llevar adelante y que sean libros".
Con este fin de etapa que representó Una noche en el bosque, la escritora comienza un nuevo camino que podría deparar más aventuras de estos maravillosos y simpátricos personajes.
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