La Casita de los Gurises “es un espacio cultural comunitario que se encuentran en el Barrio Mosconi Viejo”, dijo a AIM Cecilia Soliz, gestora del espacio y tallerista de comunicación. Ante las complicaciones políticas y económicas “que afectan directamente a los sectores más vulnerables, más postergados y a la cultura comunitaria, decidimos hacer una venta de agendas”, que son realizadas en el taller de serigrafía.

El espacio, “funciona hace 20 años más o menos; en un principio surgió como una guardería nocturna que abría frente a la Escuela Esparza y unos años después Griselda Ansola, que fue su fundadora junto con vecinos del barrio, lograron obtener esta casita que hoy tenemos y nos alberga desde hace un montón de tiempo”.

En la Casita, como todos la llaman, “las actividades que se hacen son talleres. El año pasado funcionaron de batucada, artes y comunicación. También hacemos encuentros, como uno de educación ambiental; fiestitas; espectáculos. La idea del lugar es que sea un espacio cultural gratuito para los chicos y chicas del barrio. Hemos dado apoyo escolar, diferentes actividades culturales que vamos sosteniendo todos los años”. Allí concurren semanalmente entre 15 y 20 chicos y en las actividades abiertas suelen congregarse unos 60 niños.

Cecilia detalló a esta Agencia que: “Si bien no es la idea que sea un merendero, ni un comedor, ni un salón vecinal, siempre cuando hacemos un taller o en cada actividad que realizamos siempre compartimos la merienda con los chicos, porque sabemos de la necesidad del lugar y que muchas veces también en los comedores o merenderos no se brinda tanto esta otra pata de lo cultural. Nosotros también nos sumamos a que haya una especie de merendero en nuestro centro, pero siempre la actividad principal es lo educativo y cultural”.

Al ser un espacio independiente y que se financia de manera autogestiva, realizan rifas, peñas, venta de cosas, donaciones. “También presentamos proyectos en las distintas convocatorias que salen tanto a nivel municipal, provincial como nacional”. Pero como este año, “eso está medio caído, vemos que no hay tanta convocatoria, a nivel nacional no hay un Ministerio de Cultura que antes destinaba algunos fondos para estos espacios y podíamos presentar proyectos”.

La Casita de los Gurises del barrio Mosconi Viejo trabaja en red, explicó Cecilia Soliz, “con diferentes organizaciones y espacios hermanos de la ciudad. Uno muy importante es la Biblioteca Popular Caminantes con quien siempre coordinamos acciones, movidas, juntadas, actividades en conjunto; como así también con Barriletes; Casa de la Cultura y otros espacios comunitarios y merenderos de la zona”.

Ante las complicaciones políticas y económicas “que afectan directamente a los sectores más vulnerables, más postergados y a la cultura comunitaria, decidimos hacer una venta de agendas”.

Las mismas se realizan en el taller de serigrafía de la Casita de los Gurises, “en el cual hacemos distintas producciones gráficas y este año largamos estas agendas que son perpetuas, la podés arrancar en cualquier momento del año y vas marcando los meses, los días”, a beneficio “de todo lo que vamos a hacer durante el año, el funcionamiento de la casita, los espacios de taller y las actividades culturales”.

Para colaborar con la Casita de los Gurises, el bono contribución es de 8.000 pesos o dos cuotas de 5.000 cada una, con la que “te llevás una agenda hermosa y original hecha en nuestro taller”.