La industria de los juguetes atraviesa uno de sus peores momentos frente a las medidas de cuarentena obligatoria dispuestas para enfrentar la pandemia del coronavirus en el Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba), en donde se concentran el 90 por ciento de las fábricas, las cuales están cerradas y sin poder producir, lo que se suma al no funcionamiento de las jugueterías más pequeñas, que no pudieron adaptarse a la venta online.[{adj:17478 alignright}]
El titular de la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ), Emmanuel Poletto, señaló que el sector atraviesa por una "situación complicada", potenciada por el trunco regreso a la producción de las más de 180 compañías que son parte del Amba con la vuelta a la fase 1, que desde que comenzó la cuarentena sólo pudieron permanecer abiertas "durante tres semanas".
Negocios que no abrieron
El comienzo de 2020 traía esperanzas renovadas en el rubro de los juguetes tanto para las jugueterías como para las pymes del sector industrial, que, según explicó Poletto, venían "golpeadas desde 2015", pero habían repuntado en los primeros meses antes del contexto de pandemia, con un crecimiento del consumo y una "caída en la importación".
Sin embargo, el panorama cambió a partir de mediados de marzo con la aplicación de la cuarentena, con las jugueterías imposibilitadas de vender al público desde el mostrador y con una suba en la venta de productos importados. "Los únicos negocios que pudieron mantenerse en este contexto son las grandes jugueterías, las cuales, a diferencia de los locales más pequeños, se adaptaron a la venta online. Pero, al no poder funcionar la producción, los productos importados cubrieron el mercado, que suelen ser mucho más caros y de más difícil acceso para la gente", subrayó el titular de la CAIJ.
Al respecto, Poletto destacó que en la actualidad "7 de cada 10 juguetes que se venden provienen del exterior".
Preocupación
La llegada de la fecha de mayor venta en cantidad de juguetes del año, que representa, en palabras de Poletto, "más de la mitad de la comercialización" y que afectará al sector en varios sentidos, a pocas semanas de su llegada, sobre todo porque además ya se agotó el stock de muchos productos.
"Ya estamos a 40 días del Día del Niño y hay que tener en cuenta que los festivales y eventos que se realizan todos los años cuando se aproxima la fecha no se va a poder hacer, lo que va a jugar en contra del consumo. Por otra parte, al tener paralizada la producción, hay muchos juguetes que necesitan un largo proceso para hacerse y con sólo tres semanas de trabajo quedamos a mitad de camino", sostuvo el presidente de la CAIJ.
En este sentido, la producción de los "juguetes plásticos, que necesitan de procesos productivos más largos, como en el caso de los monopatines y las bicicletas", faltarán en las jugueterías con vistas al Día del Niño, porque llevan "un tiempo de ensamblaje más largo", aseguró Poletto.
Lo mismo sucederá, según manifestó el presidente de la Cámara de la Industria del Juguete, con los juegos de mesa, las pelotas y las muñecas, que en este último caso necesitan de tiempo para la realización de aspectos del juguete como "la decoración y los vestidos". Por ello, Poletto indicó que desde la CAIJ exigen que "con un protocolo sanitario bien establecido, más el cumplimiento del distanciamiento social, se puede reabrir en julio los negocios" y se ofrecieron modalidades como el "take away" y que la reapertura no se haga para el mes de agosto, porque sería "demasiado tarde".
Faltantes para la Navidad
Por otra parte, la extensión de la cuarentena obligatoria y las restricciones en la producción afectaron de forma directa al sector del cotillón y Poletto sostuvo al respecto que faltarán "arbolitos de Navidad" para diciembre. Esto se dará porque los artículos de este tipo llevan "un largo proceso de fabricación" y las empresas que se dedican a este rubro no pudieron aún comenzar con el proceso, lo que pone en serio peligro la falta de stock en artículos de Navidad para fin de año.
Por último, Poletto se refirió al panorama económico para el sector, que no es para nada alentador en estos tiempos, frente a un contexto en el cual el titular de la CAIJ señaló que las pymes de los juguetes se encuentran "atrasadas en el pago de sus impuestos y con la necesidad de pagar el medio aguinaldo en cuotas".
Respecto de esta situación, Poletto alertó que "pocas empresas" pudieron cumplir con los requisitos para acceder a los créditos al 24 por ciento para las pymes y que, si bien todas han recibido la ayuda de la Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP), no fue suficiente en algunos casos "para cubrir todos los salarios".