Según un estudio de la Universidad de Estocolmo, el pico sur del macizo de Kebnekaise se fue degradando desde 1990 y ya perdió 20 metros
El único glaciar que queda en la cima de una montaña de Suecia, que hasta 2019 también fue su pico más alto, perdió dos metros de altura el año pasado debido al aumento de la temperatura del aire provocado por el cambio climático, afirma un estudio de la Universidad de Estocolmo.
Los investigadores aseguran que la degradación de la montaña, llamada Kebnekaise, comenzó en 1990 y que desde entonces ya perdió más de 20 metros.
Sin embargo en 2019, según publicó hoy el diario The Guardian, el pico sur del macizo pasó a estar en el segundo lugar en la clasificación de montañas suecas después de que se derritiera un tercio de su glaciar. Ahora, su pico norte, donde no hay glaciar por debajo, es el más alto del país.
En un comunicado de la Universidad de Estocolmo, se informó: “El 14 de agosto, investigadores de la estación de Tarfala midieron el pico sur de Kebnekaise a 2094,6 metros sobre el nivel del mar. Esta es la altura más baja desde que comenzaron las mediciones en la década de 1940“.
De este modo se explicó que “la disminución en el pico y el cambio de apariencia se pueden explicar principalmente por el aumento de la temperatura del aire, pero también por las condiciones cambiantes del viento, que afectan el lugar donde se acumula la nieve en el invierno”.
El macizo de Kebnekaise se encuentra a unos 150 kilómetros al norte del Círculo Polar Ártico en la cordillera de las Montañas Escandinavas, que se extiende a lo largo de gran parte del norte de Noruega y Suecia, y forma parte del Patrimonio de la Humanidad de Laponia.
En el texto además los investigadores de la Universidad de Estocolmo citaron el reciente informe del panel climático de la ONU en el que se concluyó que el calentamiento global causa un derretimiento sin precedentes de los glaciares, por lo que se recomendaba reducir las emisiones de gas invernadero en forma drástica, rápida y sostenida.
La semana pasada, en medio de una ola de calor nunca antes reportada en Europa, donde por ejemplo Italia reportó la temperatura más alta de su historia, la ONU pidió así limitar el impacto del cambio climático que puede causar fenómenos extremos como tormentas, sequías y olas de calor mucho peores y más frecuentes que las actuales.
Fuente: La Nación (Argentina)