De acuerdo a un nuevo reporte publicado por Tax Justice Network, British American Tobacco (ex Nobleza Picardo) aprovecha vacíos legales para evitar pagar el total de los impuestos a la renta corporativa en países de bajos y medianos ingresos. Esto lo hace a través de la transferencia de regalías desde estos países hacia subsidiarias en otros lugares del mundo. Por Matthew L. Myers, Presidente de Campaign for Tobacco-Free Kids.
Anualmente, el consumo de cigarrillos es responsable de que se gasten 1.4 mil millones de dólares globalmente en costos de salud y pérdida de productividad. Este hecho hace que las maniobras contables de British American Tobacco para evitar el pago de los impuestos necesarios para financiar la atención médica y otros servicios esenciales sea aún más censurable. Cualquier argumento de que British American Tobacco fortalece las economías de las naciones se desvanece cuando queda al descubierto que la compañía hace todo lo posible para evitar pagar su justa proporción de impuestos.
Según el informe, por cada dólar que British American Tobacco pagó en impuestos en los países en desarrollo donde opera, la multinacional tabacalera giró más de medio dólar que habría sido gravado localmente a una subsidiaria ubicada en el Reino Unido donde casi no pagó nada en concepto de impuestos. El análisis estima que Bangladesh, Indonesia, Kenia, Guyana, Brasil y Trinidad y Tobago en conjunto perderán un total de casi 700 millones de dólares en ingresos fiscales para el 2030 debido a las maniobras financieras de BAT, si estas acciones continúan.
El consumo de tabaco impone costos sociales y económicos masivos, especialmente en los países de bajos y medianos ingresos, donde vive el 80% de los fumadores y fumadoras del mundo. Sin embargo, British American Tobacco está explotando las reglas para pagar mucho menos de lo que exigen la legislación impositiva de los países. En 2016, British American Tobacco transfirió más del 12% de las ganancias globales antes de impuestos de la compañía (942 millones de dólares) a solo una subsidiaria con sede en el Reino Unido, donde BAT casi no tributa. Esto es solo la punta del iceberg en el caso de una compañía con más de 100 subsidiarias en 19 paraísos fiscales.
El gran costo que provoca el tabaco a las economías no es casual. Es causado directamente por empresas como British American Tobacco, que promueve sus cigarrillos de un modo que resulta atractivo a niños y niñas, con acciones en las redes sociales, productos saborizados y una comercialización agresiva cerca de las escuelas primarias.
De hecho, British American Tobacco ya está en disputas fiscales en países como Bangladesh, Brasil, Egipto, Corea del Sur, Sudáfrica y los Países Bajos por un total de más de 2 mil millones de dólares. La compañía también enfrenta investigaciones por corrupción en el Reino Unido, Rumania y Kenia.
El reporte muestra cómo British American Tobacco utiliza una serie de mecanismos para reducir el pago de impuestos, incluidos los pagos transfronterizos por regalías realizados dentro del grupo multinacional, pagos en concepto de investigación, préstamos intragrupo y pagos de dividendos.
En el caso de los países que pierden ingresos fiscales debido a las maniobras contables de British American Tobacco, el reporte de Tax Justice demuestra que:
- En Bangladesh, BAT Bangladesh evitó pagar casi 6 millones de dólares en ingresos fiscales solo en 2016, lo suficiente para cubrir los gastos per cápita en salud de más de 200,000 ciudadanos de Bangladesh por un año.
- En Brasil, la filial de British American Tobacco, Souza Cruz, redujo sus pagos de impuestos en 128 millones de dólares entre 2007 y 2014, lo suficiente como para cubrir los gastos per cápita en salud de más de 98,000 ciudadanos por año.
- Actualmente, Indonesia perderá casi 14 millones de dólares en impuestos cada año debido a los pagos entre British American Tobacco y su filial indonesia PT Bentoel Internasional Investama, suficiente para cubrir los gastos de salud per cápita anuales del país de 125,000 personas
El informe es una prueba más de que los países de bajos y medianos ingresos no pueden confiar en British American Tobacco y deben iniciar de inmediato investigaciones sobre los pagos de impuestos corporativos de la compañía o continuar perdiendo millones. El informe muestra la intención de una compañía de maximizar los beneficios para sus accionistas, la gran mayoría de los cuales viven en países de altos ingresos, y de pagar la cantidad mínima a los países para hacer frente a la carga de muertes y enfermedades causada por sus productos.