La ONG española Open Arms ha rescatado durante la madrugada de este viernes a 60 personas, entre ellas varias mujeres embarazadas y cinco niños pequeños, que viajaban en embarcaciones a punto de naufragar frente a las costas de Italia.

Los migrantes viajaban en cuatro embarcaciones precarias con alto riesgo de naufragar. ?

"Una noche muy difícil para la tripulación de Astral. Tras unas horas de búsqueda, nuestro velero se encontró frente a cuatro barcos de hierro distintos, precarios y superpoblados, con alto riesgo de naufragio", ha comunicado la ONG en sus redes sociales, en las que han difundido vídeos e imágenes del rescate.

Una de las mujeres embarazadas ha tenido que ser intervenida de urgencia a bordo tras perder el conocimiento, y se encuentra en un estado de salud "crítico". La ONG ha pedido a las autoridades italianas su evacuación médica inmediata y la asignación de un puerto seguro de desembarco.

"Recordamos que Túnez no puede ser considerado un puerto seguro de desembarco, ya que se trata de un régimen autoritario donde no se respetan los derechos de los solicitantes de protección y asilo", ha denunciado la organización en un comunicado.

"En los últimos meses, el Gobierno tunecino está llevando a cabo una política xenófoba contra las personas migrantes procedentes de África subsahariana, víctimas de violencia y que en numerosos casos han sido detenidas y abandonadas en el desierto sin agua ni comida, cosa que ha causado decenas de muertos, incluso de menores de edad", ha insistido.

Las autoridades italianas piden embarcar a los migrantes
El Astral, que habitualmente auxilia a los migrantes en peligro en el mar hasta que son rescatados por una embarcación más adecuada, recibió en este caso indicaciones de las autoridades italianas para pedir el desembarco en Túnez.

"Tenemos cinco bebés a bordo, dos de los cuales de algunas semanas, necesitamos un puerto de desembarque de inmediato", ha urgido la organización tras recordar que el rescate de las 60 personas se ha ejecutado siguiendo indicaciones de las autoridades italianas.

El pasado jueves, el Astral localizó a otros 105 migrantes, muchos de ellos mujeres y niños, en otras cuatro embarcaciones que corrían peligro, todas cerca de la isla de Lampedusa.

En la isla italiana se hacinan más de 2.000 personas, a pesar de que las instalaciones tienen capacidad para entre 300 y 400, informa Efe. La Fiscalía de Agrigento y la policía organizan traslados a la península para reducir el número.

La ruta del Mediterráneo central sigue siendo la más usada para llegar a las costas europeas, a pesar de su peligrosidad. En el último naufragio murieron 41 personas, según narraron los únicos cuatro supervivientes. El barco había partido de Túnez, país que ha sustituido a Libia como principal origen de las travesías.

La ONU ha pedido "mecanismos coordinados de búsqueda y rescate y vías seguras y legales para la migración y el asilo".

Según los últimos datos del Ministerio del Interior italiano, en lo que va de año han desembarcado casi 94.000 migrantes en las costas italianas, más del doble de los cerca de 45.000 del mismo periodo del año anterior.