El partido del Kremlin, Rusia Unida, está dispuesto a debatir la propuesta de la Federación de Sindicatos Independientes de Rusia (Fsir) de implantar en el país la semana laboral de cuatro días con el mismo salario, declaró este martes el diputado oficialista Andréi Isáyev.
"Los diputados están listos para sumarse al debate de esta idea con los sindicatos y redactar el correspondiente decreto ley. El debate podría comenzar en septiembre", manifestó Isáyev, citado por la agencia rusa Interfax.
Este mismo martes la idea fue presentada por la jefa del Departamento de Relaciones Sociales y Laborales de la Fsir, quien afirmó que esta medida sería un medio de "optimizar los tiempos de trabajo y descanso", con la condición de que se mantengan los niveles salariales.
Isáyev afirmó que los diputados de Rusia Unida, que cuentan con mayoría en la Duma (cámara baja), apoyan "sin lugar a dudas" esta iniciativa.
"Este cambio permitirá a las personas tener más tiempo para el descanso, que podrán pasar con su familia, dedicarse a estudiar o a velar por su salud", señaló.
El diputado recalcó que la conservación del salario es "una condición necesaria".
"El salario debe mantenerse e indexarse en correspondencia con el incremento de los precios y las posibilidades de las empresas y el presupuesto estatal", añadió.
Estimó que esta decisión también incidiría en los niveles de desempleo, aunque advirtió de que la medida debería aplicarse paulatinamente.
Como argumento esgrimió que, entre finales del siglo XIX y principios del XX, a muchos les parecía imposible establecer las jornadas laborales de ocho horas, sin embargo una medida como la propuesta por los sindicatos es realizable.
Esta idea fue promovida en Davos en enero pasado por el psicólogo de la Wharton School de Pensilvania Adam Grant, quien defendió que, si se reducen las horas de trabajo, los empleados pueden producir lo mismo con "mayor calidad y creatividad" y "son más leales a las organizaciones que están dispuestas a darles la posibilidad de ocuparse de sus vidas fuera del trabajo".
Según comentó a la agencia Tass la presidenta del Consejo Público del ministerio de Trabajo ruso, Elena Tópoleva-Soldunova, esta medida podría ser aplicada en Rusia en un futuro cercano.
"Todo dependerá en gran medida de las particularidades del trabajo y la producción. Hay determinadas ramas que no tienen un trabajo tan intenso y el empleador puede aplicar una semana laboral reducida. Por lo que no descartaría la posibilidad de que se implementase en sectores aislados", indicó.
Tópoleva-Soldunova recordó que en algunas empresas pequeñas ya se permite en verano que los empleados trabajen un día a la semana desde casa, algo posible gracias al desarrollo tecnológico.