La Justicia Federal decidió que quienes poseen condenas cortas, o preventivas continúen en prisión domiciliaria. La medida se adoptó por la huelga de hambre que realizan los internos de la Unidad Penal 1 y la emergencia sanitaria dictada en todo el país por el Covid -19.
Esta medida también alcanza a quienes están por finalizar sus respectivas sentencias. Es así que alrededor de 15 personas han de ser recluidas en sus respectivos domicilios.
Se espera que la justicia provincial se expida con alguna medida relacionada a la ya dictada por el Poder Judicial Federal.
La Voz