Las víctimas fueron acribilladas a tiros. En lo que va del año ya hubo 72 crímenes.
Las estadísticas muestran que la violencia recrudeció en el Gran Rosario. El total de crímenes este año alcanza los 72 casos, contra 47 en el mismo período de 2017.
Las características de las emboscadas que terminan con muertes son otra muestra de este nuevo escenario criminal. En los últimos tres meses hubo tres triples homicidios en la ciudad y sus alrededores.
La violenta saga se inició el 11 de noviembre en la ruta A012, cerca del penal de Piñero. Javier Gaitán (27) abandonó el predio de la prisión para disfrutar de su salida transitoria, un permiso al que había accedido en julio. Lo pasaron a buscar unos amigos en un Fiat Palio.
A los pocos kilómetros, otro vehículo los encerró. Una ráfaga de disparos terminó con su vida y con la de otros dos ocupantes del auto. Un cuarto pasajero tuvo que ser hospitalizado, pero sobrevivió al ataque.
Las otras dos víctimas fueron identificadas como Brian Alexis Rodríguez (24) y Rodrigo Silva (15).
La investigación judicial tuvo pocos avances. La principal hipótesis del expediente es que se trató de un ataque por encargo con la disputa por el control de la droga de fondo.
La noche del 22 de marzo, en Tablada, uno de los barrios más calientes de Rosario, un auto se acercó a un domicilio de Colón al 3800 cuando la mayoría de los vecinos de la cuadra estaban cenando.
Dos personas bajaron y rompieron el cerrojo de una puerta con una patada. Luego, acribillaron a Rodolfo Palavecino (42), Marcelo González (45) y Fabrizio Heredia (38). El caso también está siendo investigado como un ajuste de cuentas ligado a la venta de drogas.
Palavecino, quien vivía en la casa, tenía un procesamiento en la Justicia Federal por comercializar drogas. Los otros dos también contaban con antecedentes delictivos. El lugar había sido allanado en otras oportunidades. La causa por el momento no tiene detenidos.
Este lunes, al llegar a una casa de Liniers al 200, en Granadero Baigorria, al norte de Rosario, Ezequiel Fernández (38), José Fernández (30) y Gerardo Abregú fueron emboscados. El fiscal Florentino Malaponte, a cargo de la investigación, detalló esta mañana que se encontraron 28 vainas en la escena del crimen.
"No fue un enfrentamiento, las personas fallecidas no tienen señal de haberse defendido. Estaban estacionados en el lugar y los estaban esperando", explicó. El fiscal prefirió no aventurar hipótesis, aunque calificó de "razonable" la posibilidad de un ajuste de cuentas por narcotráfico.
Ezequiel “Parásito” Fernández estaba prófugo de la Justicia desde el año pasado, cuando se comprobó su participación en un secuestro extorsivo planificado desde la cárcel por Ariel “Guille” Cantero, el líder de Los Monos.
Según los investigadores, era uno de los encargados de ejecutar planes de la banda, como secuestrar a personas vinculadas al mundo narco para obtener “plata fácil”.
Clarín.-