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La mayoría de los trabajadores argentinos están conformes con su actual empleo

Una encuesta sobre condiciones laborales en la Argentina arrojó que el 58 por ciento de los trabajadores se encuentra satisfecho con su actual empleador. El amplio estudio realizado por la consultora Randstad también analiza el nivel de compromiso de los argentinos respecto al lugar donde trabaja. Así, el 47 por ciento de los consultados afirma estar muy comprometido con su empleador actual y no prevé un cambio laboral en el corto plazo, según el informe al que accedió AIM..

La encuesta especializada de situación laboral sonde también sobre el miedo de los trabajadores a perder su puesto de trabajo. Frente a esta pregunta, un mayoritario 38 por ciento manifestó que es poco probable que pueda perder su trabajo durante los próximos 6 meses y un 28 por ciento aseguró que es absolutamente improbable que su fuente de trabajo esté en riesgo, de acuerdo al detalle del documento girado a esta Agencia.

El estudio de Randstad, líder global en servicios de recursos humanos, se llevó adelante a partid de una encuesta realizada en el mes pasado de manera online a más de 3.550 personas. Del estudio surge que el 58 por ciento de los trabajadores argentinos se encuentra satisfecho con su actual empleador. Tan solo el 32 por ciento de los consultados se muestra indefinido al indicar no estar ni satisfecho ni insatisfecho con la compañía para la que trabaja, mientras que apenas el 10 por ciento asegura estar muy insatisfecho con su empleador.

El estudio de Randstad también avanza sobre el nivel de compromiso de los argentinos respecto a su empleador. En este sentido, el 47 por ciento de los consultados afirma estar muy comprometido con su empleador actual y no prevé un cambio laboral en el corto plazo. Por su parte, el 41 por ciento de los encuestados se encuentra medianamente comprometido con su empleador actual mientras que, en el extremo opuesto, el 11 por ciento de los participantes del informe asegura estar muy poco comprometido con su empleador y apenas el 1 por ciento asegura no estar comprometido en absoluto.

Asimismo, la encuesta de Randstad profundiza sobre el impacto de la situación económica del país en los niveles de seguridad y confianza en el mercado laboral que tienen los trabajadores, en particular el miedo a perder su puesto de trabajo. Frente a esta pregunta, un mayoritario 38 por ciento manifestó que es poco probable que pueda perder su trabajo durante los próximos 6 meses y un 28 por ciento aseguró que es absolutamente improbable que su fuente de trabajo esté en riesgo. Paralelamente, un 17% de los encuestados considera que es algo probable la posibilidad de perder su empleo o que no renueven su contrato durante los próximos 6 meses, el 10% lo considera algo probable y apenas el 7% asegura que es algo muy probable y esperable.

En referencia a estos resultados, Andrea Ávila, CEO de Randstad para Argentina y Uruguay, afirmó: “Estamos frente a una coyuntura en la que tanto los trabajadores como las organizaciones están adaptándose a la vuelta a lo que ya podríamos considerar la normalidad, aunque el mundo del trabajo sigue reacomodándose y generando cambios que impactan en los vínculos laborales. Este cambio de las condiciones del contrato social del trabajo pone a las organizaciones en la necesidad de adaptarse y evolucionar para adecuar sus propuestas de valor al empleado y estar muy atentos a los niveles de satisfacción y compromiso de sus colaboradores. Si se produce un descalce entre las expectativas y lo que las organizaciones ofrecen a sus trabajadores, en términos de beneficios, ambiente laboral, propósito, bienestar, flexibilidad y oportunidades de desarrollo, entre otros factores, se están exponiendo a la pérdida de talento”.

Continuando con el análisis de la percepción de confianza que tienen los trabajadores argentinos sobre las condiciones del mercado laboral actual, se les consultó a los participantes si, en el supuesto caso de tener que buscar un nuevo trabajo, consideraban posible encontrar un puesto similar al actual en otro empleador en un período de 6 meses. Al respecto, un mayoritario 44 por ciento de los consultados considera que sí podría conseguir un nuevo trabajo en un período de 6 meses, seguido de un 37% de personas que lo creen probable. Apenas a un 14 por ciento le resulta poco probable la idea de encontrar otro trabajo en un rango de 6 meses y el 5 por ciento indicó que no lo sabe.

Movilidad Laboral

En un contexto en el que hay mayor movilidad laboral impulsada por las expectativas de cambio de los trabajadores, el estudio de Randstad buscó indagar sobre la intención de cambio de empleador. En ese sentido, el 51 por ciento de los participantes de la encuesta afirmó estar atento a la aparición de buenas oportunidades, mientras que el 41 por ciento indicó estar buscando un nuevo empleo activamente y el 8 por ciento aseguró no estar abierto a un cambio laboral en absoluto.

En este punto, el informe de Randstad relevó cuáles son las razones más importantes que movilizan a los argentinos para encarar un cambio de trabajo. Frente a este interrogante, el 45% de los consultados coincidió en que la principal razón para buscar un cambio de trabajo es alanzar mejores condiciones laborales.

Entre otros motivos también mencionados por los participantes de la muestra como importantes para pensar en un cambio laboral se encuentran los deseos personales de cambio (18%); las ambiciones vinculadas a la carrera profesional (17%); el contar con opciones de trabajo remoto (6%); la flexibilidad laboral (3%); la insatisfacción con el empleador (3%); causas organizacionales (3%); causas personales (3%) y ambiciones ligadas al área de management (2%).

“Estamos viendo hoy en las empresas niveles de rotación sensiblemente mayores a lo que venía siendo la tendencia pre-pandemia. La rotación contenida durante los dos años de pandemia y el cambio de prioridades y expectativas de los trabajadores dan como resultado una mayor inclinación al cambio en la fuerza laboral, que hoy tiene un impulsor adicional, que tiene que ver con la escasez de talento y la puja salarial que genera la creciente inflación. Esta combinación de factores está generando una exigencia adicional para las organizaciones, tanto para lo que son los factores de atracción y retención, como los paquetes de compensación y los factores no monetarios, tomando en cuenta que en la mayoría de los segmentos profesionales estamos hoy frente a una situación de pleno empleo”, agregó Andrea Ávila.

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