En agosto las jubilaciones y pensiones aumentan el 4,58 por ciento -de acuerdo a la inflación de junio, según la Resolución 390/2024 de la ANSeS, publicada este martes en el Boletín Oficial. Pero los haberes mínimos y sub mínimos recibirán un porcentaje menor (entre 3,13 por ciento y 3,47 por ciento) porque se mantiene sin cambios el bono de 70.000 pesos, el mismo valor que vienen cobrando desde marzo. Y eso determina, además, que en lo que va del año, los haberes mínimos pierdan en relación a la inflación, por encima de lo que perdieron durante los 2 gobiernos anteriores.
Con el aumento de agosto, los valores serán los siguientes, de acuerdo a los cálculos del especialista Aníbal Paz:
La jubilación y pensión mínima sube de 215.580,82 pesos a 225.454.52 pesos. Con el bono, el ingreso total pasa de 285.580,82 pesos a 295.454,42 pesos. Un incremento del 3,47 por ciento
La PUAM (Pensión Universal al Adulto Mayor) -80 por ciento del haber mínimo- con el bono, el total pasa de 242.464,66 pesos a 250.363,54 pesos. Un incremento de 3,26 por ciento
El ingreso por las pensiones no contributivas -70 por ciento del haber mínimo- con el bono sube 220.906,57 pesos a 227.818,16 pesos. Un incremento del 3,13 por ciento
El haber máximo de 1,450.654,82 pesos a 1.517.094,80 pesos, una suba del 4,58 por ciento.
Las primeras tres prestaciones –que engloban a más de 5 millones de beneficiarios, el 65 por ciento del total- seguirían percibiendo el bono de hasta 70.000 pesos, sin cambios. De esta manera, se sigue licuando el valor del bono y sus ingresos se ajustarán por debajo de la inflación.
En lugar de integrar el bono a los haberes corrientes, el Gobierno insiste en mantenerlo separado y congelado como un refuerzo no remunerativo hasta que la inflación lo termine reduciendo a una proporción mínima y en determinado momento quede definitivamente anulado.
Hasta junio la inflación fue del 79,7 por ciento. Con un 5 por ciento en julio la suba promedio de los precios arrojaría un 88,7 por ciento en los 7 primeros meses.
En tanto, por el congelamiento del bono, en los 7 primeros meses los haberes mínimos y por debajo del mínimo tendrán un ingreso total de entre 67,3 por ciento y 77,7 por ciento inferior a la inflación esperada para los primeros 7 meses de 2024, sin ninguna recuperación respecto de la caída desde 2017, informa el diario Clarín.
También se ubicarán por debajo de la inflación los jubilados docentes que acumularán un 79,4 por ciento, los jubilados docentes universitarios (67,3 por ciento) y los de Luz y Fuerza (64,4 por ciento) que tienen ajustes trimestrales.
Los que no cobraron bonos tendrían una suba de 104 por ciento, una mejora del 7,7 por ciento. Se trata del sector que más perdió en los últimos 6 años; hasta un 55 por ciento.
Si los 70.000 pesos del bono de marzo se hubieran ajustado con el mismo porcentaje de suba de los haberes corrientes, el valor del mismo debería haber rondado en junio los 120.000 pesos. Además, al no ser tomado en cuenta para el pago de medio aguinaldo, hay una pérdida adicional de 60.000 pesos.