"Hola ¿Cómo estás? Tanto tiempo. Volví de España y me encantaría verte". Del otro lado del teléfono, el joven se quedó sin palabras. Un viejo amor de la adolescencia, una mujer casada de quien hacía mucho tiempo no sabía nada, le pedía verlo. En otro momento, este encuentro no tendría mucha relevancia más que para sus protagonistas. En tiempos de coronavirus, la historia tuvo otro giro: derivó en el aislamiento preventivo de Selva, un pueblo de 2500 habitantes.
Tras recibir ese llamado, el joven viajó desde esa localidad, ubicada a 310 kilómetros de la capital santiagueña, hacia Córdoba para encontrarse con la mujer, oriunda de Ceres, Santa Fe, ciudad que también tuvo que ser aislada. El escándalo no termina ahí: como muchos se niegan a cumplir la cuarentena, la intendenta de la ciudad santafesina pidió la intervención del Ejército para garantizar el aislamiento entre las dos ciudades fronterizas.
Hoy, Selva es un pueblo fantasma: el miedo se apoderó de la gente, a la espera de los resultados del hisopado que se le realizó al joven para determinar si está infectado con el coronavirus.
Tras el encuentro, el joven volvió a Selva y compartió un asado con varios amigos , a quienes les contó la historia. Les habría comentado que la mujer le había dicho que tenía síntomas compatibles con el coronavirus, pero ambos le habrían restado importancia e intimaron.
Sus amigos no podían creer lo que escuchaban. Algunos se fueron en ese instante del asado, otros lo increparon y a uno de ellos tuvieron que contenerlo para que no lo agrediera físicamente. Finalmente la denuncia llegó hasta el ministerio de Salud de la provincia, que actuó rápidamente activando el protocolo. Luego el gobierno provincial decidió el cierre total y aislamiento del pueblo.
El propio gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, compartió en sus redes un video filmado desde un dron en el que se ve cómo está Selva hoy, vacía y cercada por la policía de la provincia.
Fuentes del gobierno santiagueño informaron que Zamora se comunicó con su par de Córdoba, Juan Schiaretti, y le comentó la situación; agregaron que el primer mandatario cordobés le confirmó que la mujer había dado positivo en el test de Covid-19. Además, le contó que también se presume que puede haber contagiado a varias personas de su entorno cercano, incluido su esposo.
Hoy Selva está desierta y el joven está aislado en su casa, al igual que los que participaron del asado donde se supo todo.