Por Fundación Barbechando, especial para AIM. El plenario de comisiones de Legislación General y de Agricultura y Ganadería de la Cámara de Diputados comenzó a debatir el proyecto de ley que prevé la creación del Fondo Fiduciario Público de Crédito para la Agricultura Familiar (Crapaf), que apunta a otorgar créditos hipotecarios sobre tierras públicas ociosas. Durante la jornada de debate expusieron funcionarios nacionales.
La iniciativa de ley establece que el fondo tiene como objeto facilitar el acceso a créditos destinados a la adquisición de inmuebles rurales y la construcción de viviendas para la Agricultura Familiar de las familias productoras que carezcan de tierra propia.
Los invitados a la reunión fueron el ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo y la presidenta del Consejo Nacional de Coordinación De Políticas Sociales, Victoria Tolosa Paz. Luego participaron una docena de legisladores que plantearon su apoyo y alguna opinión adicional.
Arroyo se presentó como fuerte defensor del proyecto ya que, dijo” permitirá la creación de trabajo masivo”. Luego dijo que garantizar la “producción de alimentos va a ser uno de los ejes centrales del proyecto” así como “acceso a la tierra, desarrollo agroecológico, crédito el acceso a la tierra”.
La presidenta de la Comisión de Legislación General, Cecilia Moreau (FDT-Buenos Aires) habló de garantizar la estabilidad de las familias que podrían acceder a tierras fiscales sin uso. Durante la plenaria se hizo referencia al “acceso al crédito” y al “derecho a la tierra” en busca de “alimentos saludables.
Los legisladores coincidieron en no “ideologizar el debate”, ya que dijeron que “el proyecto no tiene identificación partidaria” y hubo coincidencia en la necesidad de que el proyecto tenga una aprobación rápida “ya que puede garantizar la producción, dinamizar la economía familiar, solucionar el tema del arrendamiento, además de garantizar el acceso a la tierra”.
Los legisladores del PRO coincidieron en que el Fondagro vigente desde el gobierno anterior podría sumar. Arroyo aclaró que este proyecto que comenzará a debatirse, “es superador y mucho más abarcativo, ya que suma desarrollo local y apunta al desafío argentino de incrementar la producción, con escala y volumen”.
Algunos legisladores coincidieron en que se planifica otorgar créditos hipotecarios sobre tierras públicas ociosas, cuya ocupación sea la principal, “no pueda venderse por 20 años”, destinada a producir “sin uso de agrotóxicos”, con finalidad de “lograr arraigo y otorgar previsibilidad a la agricultura familiar”.