La "nueva política" que prometió a la gente que necesita creer en algo para no sentirse en el vacío venía con Cambiemos a cambiar radicalmente las maneras viciosas de los políticos anteriores.
Entre ellas una muy detestable era amenazar con cortar el chorro financiero a las provincias si no accedían a los deseos de la metrópolis. Se trataba de aplicar un procedimiento anticonstitucional impuesto por decreto tras el golpe de 1930 por el que el ente recaudador fue el Estado nacional . Según nuestras normas constitucionales, la atribución de cobrar impuestos es de las provincias, que una vez que recaudan deben coparticipar a la nación y no al revés, como acontece ahora
Pero Lilita Carrió, una de las adelantadas de la nueva política a pesar de que la larga práctica de la vieja le ha dejado huellas indelebles, ha recaído en las viejas mañas: amenazó al gobernador de Córdoba a dejar a su provincia sin obras si no contribuye a aprobar el presupuesto nacional de 2019.
Tras su burla de los radicales, a los que dijo manejar "desde afuera" y que harían lo que ella quisiera, Carrió abrió un nuevo foco de conflicto, esta vez con el gobernador cordobés. "Vino a chantajear", le respondieron.
Carrió amenazó a Schiaretti que si no apoya el Presupuesto 2019, Córdoba no tendrá "obras"
"Schiaretti tiene que apoyar, si no, no tiene obras.
Si Córdoba quiere hacer obras y no están presupuestadas en la Nación, no podrá hacerlas si no está aprobado el presupuesto 2019", advirtió la legisladora nacional en una visita a la provincia.
En respuesta, la diputada nacional de Unión por Córdoba Alejandra Vigo le apuntó a su par de la Ciudad y advirtió: "Vino a chantajear a los cordobeses".
"Aún usa métodos de la dictadura", enfatizó Vigo.
En una visita a Jesús María, también se refirió a los gobernadores y aseguró que ninguno fue "tan machito" como para hacerle reclamos a la ex presidenta Cristina Kirchner.
"¿Por qué nadie fue tan machito para ir a reclamarle a Cristina Kirchner, que le robaba todos los días la coparticipación? Hay mucha equidad con los gobernadores al lado de Cristina. Lamento que no le hayan pedido nunca a Cristina lo que le piden hoy al Gobierno nacional", subrayó la líder de la CC en declaraciones a la prensa.
Carrió parece sangrar por las numerosas llagas que mantiene abiertas y que la llenan de dolor y deseos de venganza. No solo las referidas a Cristina, que le infligió una derrota electoral humillante, sino contra los radicales, que según ella la mandaban a preparar empanadas y ahora están obligados a hacer lo que ella dice.
En su momento, el ex presidente Raúl Alfonsín la caracterizó de manera suficiente: es una "traidora" e "hipócrita", una de los dirigentes "más antirradicales que tiene el país".
Alfonsín recordó en una visita a Entre Ríos que cuando la UCR decidió conversar con otros partidos opositores, aunque de ideas similares a las de la conducción de la centenaria fuerza, "la primera consulta que se hizo fue con la doctora Carrió", y agregó: "Nos contestaron que el ARI no iba a dialogar con la UCR". El ARI fue una de las agrupaciones de creó y dinamitó Carrió
De la Redacción de AIM.