La semana comenzó con detenciones de dos trabajadores migrantes de la comunidad senegalesa en el barrio porteño de Once, a quienes les secuestraron la mercadería. Durante el fin de semana, tres mujeres vendedoras ambulantes también fueron apresadas y heridas ferozmente por la represión policial en el partido de San Martín, Provincia de Buenos Aires, confirmó a AIM el referente del sector, Omar Guaraz.
Mientras tanto, “el Gobierno de la Ciudad aprovecha la pandemia para intentar anular al sector de la economía popular, pretendiendo que no existe o, en todo caso, que no debería existir”, advirtieron a AIM desde el Bloque de Trabajadores Migrantes.
Sin embargo, “existimos. La economía popular es la respuesta autogestiva de millones de trabajadorxs excluidxs del mercado laboral formal, que debemos garantizar nuestras necesidades básicas ante el abandono y negacionismo del Estado”, aseveraron desde el sector a este Medio.
Por ello, “exigimos su liberación y el respeto de las garantías de todos los vendedores privados de su libertad, así como el procesamiento debido de su mercancía”, dijeron y ratificaron: “Basta de secuestrar mercadería sin confección: eso es robo”.
Diariamente la Policía de la Ciudad arremete contra vendedores ambulantes que desarrollan esta práctica como método único de subsistencia, tomando las precauciones sanitarias correspondientes. “Denunciamos la persecución y la criminalización de trabajadores excluidos y, en particular, la marcada discriminación de vendedores migrantes”, señalaron.
En ese marco, “exigimos que se respete el artículo 83 del Código Contravencional de la Ciudad, que determina que "no constituye contravención la venta de mera subsistencia". Así mismo, demandamos que la respuesta del Estado sea el desarrollo y aplicación de políticas públicas de inclusión laboral, en vez de las prácticas sistemáticas de violencia institucional, discriminación, racismo y xenofobia”.