Se cumplirá un siglo de un hecho que marcó la memoria de los vialenses hasta ahora: el estallido de una caldera instalada en un molino harinero de la ciudad que quedó reducido a escombros.
La gran explosión no dejó víctimas porque se produjo de noche, cuando no había operarios en el molino San Spírito, de los hermanos Tropini, emprendedores de la zona
La caldera comenzó a funcionar correctamente, pero a pocos meses de instalada estalló y dejó reducido a cenizas el molino, instalado poco antes
Según datos de entonces, el estallido se debió a una falla en una válvula, que permitió una sobrepresión de centenares de atmósferas de vapor de agua, liberadas en un instante con efectos devastadores.