El juez porteño Lisandro Fastman consideró que la obligación impuesta a los habitantes de la ciudad de Buenos Aires de pedir permiso a los mayores de 70 años para salir a la calle, cercena los derechos constitucionales a trabajar y ejercer toda industria lícita "con arbitrariedad, incongruencia e irracionabilidad manifiesta", y la declaró inconstitucional.
Al dar a conocer la medida, mientras elogiaba a las cámaras recién importadas de China que miden la temperatura corporal en las estaciones de trenes de Buenos Aires, un periodista televisivo se mostró molesto y hizo con una mano gestos que se podían interpretar como alusivos a una medida necia que había que dejar pasar, ya que el gobierno no la apelaría.
Las medidas restrictivas que llueven sobre los habitantes de Buenos Aires, de la Argentina y del mundo con relación a la pandemia de Covid 19 son celebradas por la prensa de manera unánime, siempre como ejemplos de cuidado de la salud de la población. Salvo esta medida del juez Fastman -apellido que la prensa no se privó de recordar que significa "rápido" en alemán, todo parecía ir viento en popa para los que se toman atribuciones sobre libertades tan elementales como las de circular por todo el territorio nacional o de trabajar.
En realidad, esta medida de Horacio Rodríguez Larreta había merecido críticas incluso dentro de las facciones de su partido que responden a la ex ministra Patricia Bullrich y al ex presidente Mauricio Macri, pero habían sido apoyadas por el presidente Alberto Fernández, quizá porque lo aliviaban del peso político de una decisión de esta índole
Fastman dijo que la norma que declaró inconstitucional infringe no solo la constitución que protege la libertad e igualdad de las personas, sino también resoluciones recientes de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
El juez respondió con su sentencia a un amparo interpuesto por el abogado y periodista Silvano Lanzieri, que sintió afectados sus derechos para circular por la Ciudad de Buenos Aires. El día anterior, el conocido agitador Carlos Escude, doctor en ciencias sociales por la universidad de Yale, había salido con a la vereda de su casa en Buenos Aires golpeando una sartén y con un cartel que proclamaba que tenía 71 años y proclamaba que prefería la peste a Rodríguez Larreta.
De la Redacción de AIM.