Padres Organizados de Entre Ríos hizo llegar a AIM un documento en el que señaló que no profundizar "la tragedia educativa, depende de todos”, tras concluir la segunda semana del ciclo lectivo 2021.
“Argentina forma parte del infame listado de países que, durante todo el 2020, mantuvieron las escuelas cerradas en todos sus niveles”. Durante el último año escolar, “con 56 por ciento de niños pobres, con el 80 por ciento de los NNyA (Niños, Niñas y Adolescentes) con problemas de conectividad y con familias con dificultades para el adecuado acompañamiento, la brecha educativa se agigantó”, indicaron.
Los cálculos más conservadores -según esta red- hablan de un millón y medio de chicos que perdieron vínculo con la escuela: “A esta verdadera tragedia, el regreso a la ‘presencialidad cuidada’ basada en protocolos anticuados, que no toman en cuenta la evidencia científica ni la experiencia internacional y que nos está llevando a que nuestros NNyA pierdan al menos medio año escolar, le sumamos paros docentes”.
Paro docente
Al referirse a los paros docentes, advirtieron que “el legítimo reclamo al salario digno, no puede subrogar el derecho de millones de niños, niñas y adolescentes a educarse” y aseguraron que “la educación no puede defenderse con aulas vacías”.
“Sabemos del compromiso docente, del esfuerzo y el compromiso con que cientos de maestros, maestras, profesores y profesoras hicieron frente a la virtualidad, cargando sobre sus ingresos los costos de la educación a distancia. Pero también sabemos que no es posible perder más presencialidad”.
También plantearon que “nuestros NNyA asistan a clases en cada una de las instituciones educativas. Es hora de pensar alternativas de lucha que no perjudiquen a los más perjudicados en esta pandemia”.
Teléfono para el gobierno
Después de un año sin clases presenciales, “exigimos al gobierno provincial que arbitre los medios necesarios para garantizar la paupérrima presencialidad a la que someten a nuestros niños”, lanzaron Padres Organizados de Entre Ríos.
“No pueden seguir siendo víctimas de un endémico deterioro de la educación pública”, consideraron al exponer una serie de necesidades de los docentes: “Es preciso reconocer a los docentes que brindan lo mejor de sí. Es preciso distinguirlos de quienes empañan la profesión. Es preciso profesionalizar y dignificar la carrera docente y eso incluye salarios dignos”.
“Pero por sobre todo, incluye a nuestros NNyA en las aulas. Que la educación pública vuelva a ser igualadora. Que las familias que menos tienen sepan que pueden construirles el futuro a sus hijos en una escuela pública de calidad, comprometida con el potencial humano y con el desarrollo de la provincia”, señalaron.