Ante la concreción del cierre del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi), “es sumamente tristísimo para todas las personas que hemos sentido esa inclusión y que hoy estamos afuera. Tengo esperanzas que la sociedad acompañe, recapacite ante las ausencias de estas políticas públicas que han ayudado a la inclusión y a amortiguar los casos de discriminación”, dijo a AIM el extrabajador del organismo, Julián Ríos.
El instituto “arrancó sus funciones en 1994 con la lucha que tiene que ver específicamente con la xenofobia y el racismo, creado bajo la Ley 23.592 antidiscriminatoria que penaliza los actos discriminatorios y tiene dentro de sus funciones lo que es la prevención”, señaló Ríos a esta Agencia.
En materia de prevención explicó que “es la tarea que cumplía el Inadi, que era llegar antes que se cometa el acto o delito discriminatorio, porque cuando estamos hablando de una discriminación es cuando llegamos ya llegamos tarde, cuando una persona o grupo corrompió el derecho a otra persona o grupo. La importancia de la prevención es sumamente importante porque con esta estamos previniendo a una persona que se le dio el derecho que es reconocido por alguna ley, regulación o demás; también permite detectar aquellos grupos que se encuentran vulnerados o vulnerables en la sociedad por una falta de derechos o porque no se están cumpliendo los mismos”.
Julián Ríos ejemplificó que “el hecho más concreto donde lo podemos observar es en la comunidad Lgbt o en el grupo de mujeres que en el último tiempo han ganado derechos: ley de matrimonio igualitario, fertilización asistida, entre otro tantos que en las últimas décadas se han podido ganar gracias a lo que es un trabajo de prevención y a la vez el ir descubriendo qué grupo está siendo vulnerado”.
Para quienes han trabajado en Inadi, el cierre definitivo “es un proceso muy triste, más allá del quedarte sin trabajo que es horrible, pero te duele en sí la pérdida de tantos derechos a partir del cierre definitivo de una institución que se ha abocado a la prevención y a la inclusión de estos grupos minoritarios a lo largo de la historia”, y agregó que el organismo “tiene un gran recorrido en nuestro país con casos concretos que se han podido incluir y que han sido realmente positivos para las personas y la sociedad, que ha aprendido a tener empatía con aquellos sectores que históricamente han sido vulnerados”.
“Hoy, el Gobierno nacional encabezado por Javier Milei y a través de su vocero presidencial, que es el que se encarga de dar las noticias de lo que va a ejecutar la presidencia, dice por febrero o marzo que comienza el cierre definitivo del Inadi porque es un organismo que no sirve para nada; la utilización de la palabra para nada está diciendo que los grupos que fueron incluidos no sirven para nada en la sociedad, que nuevamente los empezás a descartar”.
Julián Ríos concluyó analizando: “En un comunicado oficial se dice que el cierre definitivo ya es concreto, con lo cual se mueren varias políticas públicas de grupos que han sido realmente incluidos. Es sumamente tristísimo para todas las personas que hemos sentido esa inclusión y que hoy estamos afuera. Tengo esperanzas que la sociedad acompañe, recapacite ante las ausencias de estas políticas públicas que han ayudado a la inclusión y a amortiguar los casos de discriminación”.