La agrupación Rojo y Negro 1° de Mayo de la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) difundió una carta abierta donde cuestiona duramente la definición del gobierno provincial de volver paulatinamente a las aulas. “Es una decisión irresponsable, que expone al contagio a estudiantes, trabajadores de la educación y a las familias en nuestras comunidades educativas”, aseguraron a AIM.

En el peor escenario, cuando se confirman 193 nuevos casos y cuatro fallecimientos en la provincia, el gobierno de Gustavo Bordet anunció la vuelta a la presencialidad en las escuelas de nueve departamentos entrerrianos y el avance progresivo en próximas semanas.
Los anuncios por parte del gobierno provincial en boca del presidente del Consejo General de Educación (CGE), Martín Müller, “es una cachetada a toda la experiencia colectiva y solidaria que desarrollamos como pueblo para que las consecuencias de la pandemia no sean peores a lo que estamos viviendo”, se aseguró desde la agrupación docente que conduce la seccional Paraná de Agmer.
En ese marco, apuntaron que “se desvaloriza el trabajo en las primeras líneas de cada trabajador de la educación y de las familias de los estudiantes, aun costeando con recursos propios la conectividad y la impresión de materiales para llegar al último rincón con las actividades escolares”.

“Sin la aprobación del protocolo, sin escuchar las recomendaciones del Coes, esta es una medida de neto corte neoliberal y anticuarentena”, lamentaron y agregaron: “Esta decisión unilateral profundiza la fragmentación y desarticulación en el sistema educativo entrerriano. Agravan así la asimetría y desigualdad entre escuelas de una misma provincia, imprimiendo políticas diferenciadas donde imponer diferencias es un atentado”.

Además, consideraron que el gobierno de Bordet “debe respuestas urgentes a la escuela pública y a los trabajadores de la educación, ya que no tomó la decisión política de resolver la inversión presupuestaria para infraestructura, edificios y mantenimiento de las escuelas”.

“No escuchó el planteo que hicimos desde la multisectorial y el frente gremial de extraer los recursos de los sectores más beneficiados de la economía concentrada”, subrayaron y señalaron que “tampoco cumplió con los anuncios de refuerzos para partida de limpiezas (aun con la implementación de los módulos, provocaron el deterioro de la calidad de la alimentación de las familias en las comunidades educativas)”.

Asimismo, objetaron que el Ejecutivo “impone unilateralmente y por decreto un bono en negro que desvirtúa aun más el salario” y “condena” a la docencia condena a seguir bajo la línea de pobreza.

En ese sentido, exigen al gobierno de la provincia “que vuelva atrás sobre el anuncio, que resuelva destinar el presupuesto necesario para poner las escuelas en condiciones”, e insistieron “en la urgente derogación de los artículos cuatro, cinco y seis de la Ley de emergencia; y que se convoque inmediata a paritaria salarial”.

Ante ese escenario, adelantaron que en conjunto, los trabajadores de la educación en el seno del sindicato debatirán y consensuarán las medidas de acción para la defensa de la escuela pública, las condiciones laborales y los derechos como trabajadores.