Después de décadas de vivir en Nueva York escondido a simple vista, Jakiw Palij, un ex guardia de un campo de concentración nazi, fue deportado este martes por el gobierno de los Estados Unidos para ser radicado en Alemania.
Palij, de 95 años, mintió a su llegada a los Estados Unidos en 1949 con el objeto de recibir el permiso de residencia y, ocho años más tarde, la ciudadanía. El ex guardia nazi aseguró que pasó la guerra como trabajador rural o fabril, informó el sitio LA Times.
Una vez radicado en la ciudad de Nueva York, Palij trabajó como dibujante técnico y eventualmente se jubiló. Pero hace alrededor de 25 años su nombre apareció en una de las listas de guardas del campo de concentración de Trawniki, en Polonia.
"Nunca hubiese recibido mi visa si hubiese dicho la verdad. Todos mentían", reconoció Palij en 1993 al ser consultado en la puerta de su casa por personal del Departamento de Justicia de los Estados Unidos.
En 2003, un juez le retiró la ciudadanía estadounidense por "participar en actos en contra de civiles judíos" y a partir de ese momento no tuvo Patria adónde refugiarse porque ni Polonia, ni Ucrania ni Alemania lo aceptaban.
Sólo cuando cambió el gobierno de Alemania (con la coalición lograda entre Ángela Merkel y los socialdemócratas), se movieron las fichas para Palij.
Por ahora no habría suficientes pruebas de crímenes de lesa humanidad cometidos por Palij pero el ex guarda de Trawniki jugó un papel esencial en el exterminio sistemático de judíos en Polonia durante la ocupación nazi.
El Departamento de Justicia estadounidense informó que Palij era un guarda armado que "cometió atrocidades contra ciudadanos polacos" como parte de la SS Streibel Battalion, una unidad que vigilaba a los prisioneros en trabajo forzado.