Juan Lucas Onieva, doctor en Educación, profesor de la Universidad de Málaga y autor de «El convivenciario, cuentos con valor», asegura que es más importante «predicar con el ejemplo» y trabajar los valores que repetir a los niños «hay que ser responsables, respetuosos, tolerantes...». Por este motivo, explica a los lectores de ABC Familia los siguientes claves:

—Hacer saber a los hijos la importancia que tienen los valores en la vida y cómo fomentarlos.

—Encargarles tareas con las que puedan aprender cómo ayudar a los demás. Cuanto más conscientes sean los niños de que no son el centro del universo y que forman parte de una familia, una escuela o una comunidad, más dispuestos estarán a hacer cosas por los demás.

—Predicar con el ejemplo. Si se pretende que los hijos sean solidarios no basta con decírselo. Es más efectivo ir a una organización, apuntarles a una actividad solidaria, donar...

—Transmitirles la necesidad de superarse cada día y que vean que sus padres también se esfuerzan por un objetivo, que las metas no llegan solas. Los niños y jóvenes aprenden mucho más de lo que ven que de lo que oyen.

Ejemplos de ejercicios o actividades que pueden ayudar:

Ser agradecidos: en un hoja escribir todo lo que tienen, pensar en quiénes se lo han dado y agradecérselo.

Ser responsables: realizar diferentes tareas para ganarse privilegios y la confianza de sus padres.

Ser justos: crear normas para hacer de este mundo un lugar más justo.

Ser generosos: conocer las diferentes formas de generosidad y llevarlas a cabo. Es muy útil que pregunten a familiares y amigos de qué manera son generosos para que tomen nota de ello.

ABC.-