Las terapias con animales domésticos y compañía “pueden estimular y mantener desarrollos vitales, produciendo en las personas efectos favorables en diferentes áreas”, contó a AIM Mariano Strekir, fundador de Alma Canina.
Strekir quiere dejar un legado, un granito de arena en el mundo. Cuando terminó la secundaria quiso ser veterinario, pero estudió Turismo. Se recibió, pero no ejerció mucho tiempo con esa profesión. En paralelo su formación académica trabajaba como paseador de perro y se instruyó como adiestrador. El devenir lo llevó a fundar Alma Canina, nombre que utilizó para recordar siempre al primer perro que paseó: Corujo, un Shar Pie. Sin embargo, lo que lo llevó a prepararse como adiestrador de perros de terapia fue en unos de los viajes que realizó a Israel, a un kibutz. Ahí observó que cuando sonaban las sirenas había personas que eran guiados con perros a los refugios. En la sala donde estaban los perros observó dos perros con personas con discapacidad; uno lo acariciaba y, el otro, le pasaba un cepillo por el cuerpo. Ahí entendió que todo era por ese camino, trabajar con animales de terapia, en especial con perros, guiar a cada perro de la mejor manera a través de métodos positivos (juegos y premios) para ayudar a otras personas. Así nació su interés para prepararse, capacitarse y comenzar a dar color a ese sueño de ayudar a personas a través de los perros.
Las sesiones en un centro de adultos o de niños con perro de asistencia están diseñadas para ser interactivas, estimulantes y terapéuticas. Estas actividades ofrecen beneficios cognitivos, emocionales y físicos, mejorando la calidad de vida y el bienestar general de los participantes
Mariano Strekir, fundador de Alma Canina
- De a poco fui buscando donde estudiar en Argentina, y unos de los lugares que me recomendaron fue en Bocalan Argentina. Hay tres Bocalan en el mundo: España, Chile y Argentina. Todos ofrecen diversos cursos y uno de ellos era Intervención Asistida con Animales y Entrenamiento de Perros de Asistencia y de apoco fuimos formando nuestros perros de terapia.
Los perros que se utilizan, Border Collie. En las terapias son elegidos a través de una selección específica, ya que son sanos, seguros y están entrenados para poder llevar a cabo este tipo de actividades. Tienen una constitución y edad apropiadas y poseen las aptitudes y habilidades adecuadas para que su participación sea beneficiosa. El perro de terapia es un animal específicamente entrenado para integrarse dentro de un programa terapéutico o educativo, como una herramienta más de la que dispone el profesional.
- ¿Cuáles son los efectos que se obtiene al trabajar con un perro de terapia?
- Diversas investigaciones demostraron que las terapias dirigidas con animales domésticos y de compañía pueden estimular y mantener desarrollos vitales, produciendo en las personas efectos favorables en diferentes áreas. Por eso en Alma Canina, comenzamos hace unos pocos años a preparar y educar nuevos canes para terapia.
Si hacemos una revisión sobre los efectos que causa la interacción entre animales y humanos, podemos encontrar un abanico de beneficios, desde la salud física, pasando por socializar con otras personas, hasta el impacto positivo y psicológico en una persona.
Efecto sobre la salud
- ¿Qué efectos tiene sobre la salud este tipo de terapias?
- La interacción con un animal de compañía pude promover diferentes efectos positivos sobre la salud, la presencia de un animal de compañía ayuda a prevenir la aparición de diferentes tipos de enfermedad, facilita su afrontamiento y a su vez, favorece la rehabilitación de la misma. También, el animal favorece un estado de relajación derivado de los efectos de acariciar y hablar a una mascota, ayudando así a reducir los niveles de estrés.
Como hemos mencionado anteriormente, la interacción con animales propicia la actividad física y favorece el contacto físico. A su vez, favorece la interacción social y mejora el sentido del humor. En consecuencia, ayuda a contrarrestar el sentimiento de soledad y la depresión, favorece la independencia, el sentido de la utilidad y de logro, aumentando así la motivación en diversos aspectos de la vida, lo cual se traduce en un aumento de autoestima.
Diversos estudios han demostrado que la interacción con animales causa diversos efectos en el desarrollo de los niños. Demostró que dichos efectos están relacionados con la conducta social, aportando un incremento en la inteligencia emocional, en lo referido a la expresión de emociones a través del lenguaje verbal y no verbal.
De esta manera, aquellas personas que sufren alguna enfermedad crónicas pueden verse beneficiados psicológicamente por la interacción con un animal, repercutiendo más allá de su salud física. En las personas con enfermedades mentales o con una baja autoestima, se observa que al ser expuestos a una mascota, produce un cambio de atención al dejar de focalizar su atención en sus problemas, y de focalizar su atención, en este caso, en la mascota, hablándola o hablando de ella a otras personas de su entorno.
Las mascotas pueden jugar un papel muy importante para estas personas, quienes perciben a sus mascotas como compañeros; convirtiéndose en una fuente importante de consuelo y compañía. La mascota disminuye los sentimientos de aislamiento de la persona y produce una evidente disminución del estrés.De esta manera, el animal se convierte en una fuente de soporte emocional, lo que resulta de gran importancia para las personas que se sienten abandonadas y/o se encuentran aisladas.
La interacción con un animal supone una fuente de estimulación multisensorial, que permite mantener la atención sobre el mismo, lo cual implica una concentración que puede aprovecharse para trabajar diversas áreas. A su vez, las mascotas pueden contribuir a la estimulación mental como consecuencia de su inminente efecto catalizador social, produciéndose un aumento de la comunicación con otras personas, la evocación de recuerdos, la planificación de objetivos o el aprendizaje de nuevos conceptos.
Los animales pueden abrir un cauce de comunicación al fomentar el contacto social, pues sirven de tema para conversaciones y facilitan así las relaciones interpersonales. Diversos estudios demostraron que las visitas que los animales hacen a las instituciones ofrecen un pretexto para aumentar la comunicación y favoreciendo la socialización entre las personas del lugar. Estas personas se muestran más alegres, más sociables con los demás, lo cual ayuda a disminuir la ansiedad y estrés, mejorando así el estado de ánimo.
Como hemos visto anteriormente, la interacción con animales facilita el bienestar y la calidad de vida de diversos colectivos. Podemos resaltar diversos efectos positivos que el contacto con el animal, reporta específicamente en las personas mayores y en niños: Contribuye a la mejora de la calidad emocional y a la seguridad en personas que hayan podido perder motivación por situaciones saludables o hechos en su vida; su compañía mitiga la sensación de soledad, pues su presencia proporciona afecto y atención, mejorando así el estado de ánimo al ver los aspectos divertidos y entrañables de la mascota. A su vez, reduce los niveles de ansiedad; el cuidado del animal proporciona un sentimiento de utilidad, pues la persona pasa de ser cuidada a ser cuidadora; un animal siempre provoca un efecto socializador, pasearlo facilita la interacción social y fomenta las relaciones sociales con su entorno. Además provoca actividad física mejorando la salud; el hecho de acariciar a la mascota provoca un estado de paz y tranquilidad en las personas, creando un ritmo normal en el corazón y regulando así su presión arterial; hablar a los animales y observar la fidelidad que presentan hacia las personas es algo motivador y alentador en sí mismo; y la relación con el animal puede ayudar a las personas a cambiar su enfoque, logrando un actitud positiva del entorno y empática con los demás.
Asimismo, proporcionan un sentimiento de aceptación sin calificaciones ni prejuicios; la interacción con el animal se concibe como un estímulo mental, pues ayuda a la comunicación con otras personas y a la evocación de recuerdos, incrementa la distracción, la alegría y el juego y reduce los sentimientos de aislamiento; y la presencia de los animales tiene efectos beneficiosos sobre la fisiología de las personas mayores, pues contribuye a que se relajen y la presión sanguínea sea menor.
- ¿Cómo son las sesiones o clases en un centro o residencia?
- Las sesiones o clases en un centro o centro de adultos mayores con perro de asistencia suelen ser muy enriquecedoras y adaptadas a las necesidades de los residentes, diagramadas y armadas con antelación.
Los perros de asistencia suelen ser muy amigables y están entrenados para interactuar suavemente con las personas. Durante las sesiones, los adultos mayores o los niños pueden acariciar y tocar al perro, lo que proporciona una sensación reconfortante y relajante.
Los juegos de olfato, por lo que algunas actividades podrían incluir introducir diferentes olores para que los participantes los identifiquen con la ayuda del perro.
Durante las sesiones, también utilizamos sonidos asociados con los perros, como ladridos suaves o comandos, para estimular la respuesta de los residentes y también para el entrenamiento del perro.
Otras de las actividades que es unas de las favoritas es el lanzamiento de pelotas, donde el adulto mayor comienza un juego de interacción de recoger y devolver la pelota.
En algunas residencias o centros, siempre se programa las caminatas cortas con el o los perros, brindándole una actividad física de nivel bajo, al aire libre y placentera para los adultos o niños.
En resumen, las sesiones en un centro de adultos o de niños con perro de asistencia están diseñadas para ser interactivas, estimulantes y terapéuticas. Estas actividades ofrecen beneficios cognitivos, emocionales y físicos, mejorando la calidad de vida y el bienestar general de los participantes.
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