El ministro de Economía anunciará herramientas para “cuidar” las reservas que se lograron acumular. Hará también una concesión a los sectores que esperan algún gesto con los sectores más vulnerables.
El viernes pasado, en conferencia de prensa, Sergio Massa dio por cerrado el episodio “dólar soja”. El régimen cambiario especial, que benefició al complejo sojero con un dólar a $200, impulsó liquidaciones de granos por US$8.123 millones y engrosó las reservas del Banco Central en cerca de US$5.000 millones. Finalizada esta etapa, el ministro de Economía tiene al menos cinco medidas en carpeta destinadas a potenciar y “cuidar” esos dólares recaudados.
Algunas de las medidas, que comenzarán a ser oficializadas este lunes, ya habían sido anticipadas por Massa al momento en que anunció el beneficio para los exportadores sojeros como una manera de conceder compensaciones a los sectores que quedaron afuera. Otras, en cambio, tomaron forma en las últimas semanas. La mayoría apunta a incrementar el volumen exportador y reducir el volumen importador, una forma de decir que se mantiene el foco puesto en fortalecer las reservas del Banco Central, observando con rigurosidad tanto el flujo de entrada como el de salida.
1. Pequeños productores de maíz y soja y economías regionales
Tal como había anticipado, Massa dijo que con lo recaudado con el esquema dolar soja se constituirán dos fondos destinados a asistir a los productores agropecuarios más pequeños o volcados a producciones menos rentables.
Por un lado, se dispondrá un fondo para las economías regionales de $32.000 millones. Si bien no se aclaró cómo llegará ese dinero a los productores, el ministro especificó que irá a asistir a las cadenas del tabaco, la lana, el arroz, los cítricos y el vino, por ejemplo. Muchos de estos sectores ya habían elevado la voz exigiendo su propio “dólar”.
A partir de este lunes se implementará también un fondo de $42.000 millones que estará destinado a productores de no más de 200 hectáreas de maíz y soja, que no hayan entrado en el programa finalizado el 30 de septiembre. Son productores que posiblemente liquidaron antes, sin el estímulo del tipo de cambio más beneficioso. Este fondo financiará la mitad de los gastos de semillas y fertilizantes, con lo que se busca además aumentar la superficie sembrada y contrarrestar los efectos climáticos que puedan reflejarse en la cosecha.
2. Grupos vulnerables
Massa anticipó que esta semana habrá novedades sobre una “medida de protección a grupos vulnerables”, que también estará financiada por lo recaudado con el dólar soja. Si bien se negó a dar detalles para no “generar expectativas”, hay algunas pistas sobre en qué podría consistir.
Tal como anticipó elDiarioAR se espera que sea un refuerzo de alrededor de $50.000 para personas en situación de indigencia, que no perciben actualmente ayudas sociales, y que estará repartida en tres cuotas: octubre, noviembre y diciembre. En la definición de la medida intervino el frente Patria Grande, referenciado con Juan Grabois, y tuvo una participación clave la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, que la impulsó directamente unos días antes de sufrir el atentado en la puerta de su domicilio.
La medida, que debe ser articulada con Anses y el Ministerio de Desarrollo Social, llegará pocos días después que los datos oficiales que revelaron un aumento de la indigencia en el primer semestre del 2022 respecto del semestre anterior. Hay 4,1 millones de argentinos y argentinas, el 8,8% de la población, que no cuenta con el dinero necesario para comer.
3. Economía del conocimiento
Tal como anticipó el secretario de Economía del Conocimiento de la Nación, Ariel Sujarchuk, se anunciarán mejoras en el acceso al mercado de cambio para las empresas de la economía del conocimiento.
Se espera que las firmas del sector tengan disponibilidad de dólares sobre un porcentaje de las exportaciones incrementales, es decir, las que hicieron por encima de los niveles de 2021. El acceso será al 30% del volumen de esas exportaciones, porcentaje al que se podría sumar un 20% adicional si radican nuevos negocios en el país. Así, recibirán una ventaja similar a la que ya tienen los petroleros.
El anuncio de este “dólar tecno” se hará este lunes a las 18 en la cúpula del Centro Cultural Kirchner (CCK).
4. Cuidado de las exportaciones
“Ahora cada dólar que entró, lo tenemos que cuidar”, dijo Massa al anticipar que se tomarían medidas para ir contra quienes “hicieron trampa” para importar bienes que no son estrictamente necesarios para mantener la rueda de la economía en marcha como toallas, máquinas tragamonedas o hidrolavadoras.
El ministro se refirió específicamente a quienes fueron a la Justicia a reclamar por la obstrucción oficial para importar y obtuvieron una cautelar que los autorizó a hacer esas compras. Según Aduana, en los últimos dos años se otorgaron más de 10.500 medidas en favor de los importadores que le costaron a las reservas del Banco Central unos US$1.800 millones.
Esta semana Massa anunciará un sistema para hacer caer esas cautelares, específicamente 3.500 que están todavía activas. Al mismo tiempo, anticipó que habrá medidas para simplificar y dar certidumbre a las importaciones de insumos necesarios para la producción, una demanda del sector industrial.
5. Dólar turismo
Por el momento es más un pedido de distintas cámaras empresariales que una promesa de Massa, pero no hay dudas de que para el Banco Central la sangría de dólares por la vía del turismo y las compras en el extranjero es un problema.
De acuerdo con un informe de Ecolatina, en agosto la salida de divisas por viajes y pasajes y otros gastos con tarjetas rozaron los US$800 millones, el mayor valor para este mes desde 2017.
En el Gobierno todavía siguen estudiando la manera de encarecer el dólar para este tipo de gastos. Una alternativa es aumentar el porcentaje que se retiene a cuenta de impuesto a las Ganancias, pero es un dinero que finalmente vuelve a las billeteras de quienes lo gastan y puede no generar el desincentivo esperado. Otras opciones son incrementar el componente del Impuesto PAÍS –pero eso requiere su aprobación en el Congreso– o, directamente, ponerle un tope mensual al gasto a partir del cual no se puede acceder a más dólares.