Se vienen las Paso y, en el marco del acuerdo con el Fondo Monetario, el Banco Central decide cómo seguirá administrando el rendimiento del plazo fijo tradicional.
Entre las principales condiciones del acuerdo alcanzado entre la Argentina y el Fondo Monetario Internacional (FMI) se encuentra la de seguir asegurando que las tasas de política monetaria se mantengan suficientemente positivas en términos reales para sostener la demanda de pesos y hacer frente a la alta inflación. Se trata de una cláusula que el organismo repite y exige al Banco Central (Bcra) una y otra vez y la gran duda es qué hará el regulador monetario en agosto con los rendimientos del plazo fijo.
Cabe recordar que la inflación de junio que mide el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) a través del Índice de Precios al Consumidor (IPC) fue del seis por ciento, por debajo de todos los pronósticos, y, ante ese dato, el Bcra decidió mantener sin cambios la tasa del plazo fijo tradicional, luego de que por segundo mes consecutivo la inflación mensual registrara una significativa desaceleración respecto del mes previo.
Los plazos fijos tradicionales tienen una Tasa Nominal Anual (TNA) del 97 por ciento, lo que equivale a un rendimiento efectivo mensual del ocho por ciento. “Así, la tasa de interés viene real positiva en los últimos meses porque le ganó a la inflación del 7,8 en mayo y del seis por ciento en junio”, detalla a Ámbito Martín Kalos, director de Epyca Consultores.
Sin embargo, para julio y agosto se prevé una aceleración de la inflación como consecuencia de distintas variables, entre las que se destacan las medidas que encarecieron el tipo de cambio para los importadores y la implementación del dólar maíz y el salto de los paralelos del último tiempo. Así, las previsiones de las principales consultoras de la City anticipan que el dato de inflación del séptimo mes del año estará por encima del de junio y lo mismo esperan para agosto. En ese contexto, ¿qué hará el Bcra con las tasas?
“Esperamos que el Bcra mantenga los rendimientos al menos hasta las generales de octubre. Nuestros números nos dan que la inflación de julio estará en torno al siete por ciento, con lo cual, la tasa del plazo fijo en el ocho por ciento mensual es positiva aún en términos reales expos (respecto de la inflación previa) y también ex ante (en relación al dato de agosto)”, responde a la pregunta Lorena Giorgio, economista jefe en Equilibra. Así, señala que no habría razones para que el Bcra tocara las tasas este mes
En igual sentido apunta el economista de la Universidad de Avellaneda Pablo Ferrari, quien asegura que, “dado que el Bcra ha seguido la inflación con la política de tasas no debería subirla”.
Kalos coincide con esa mirada cuando sostiene que, después de la aceleración que se espera a partir de agosto para la inflación, “es poco probable que se disponga una baja de tasas y lo más probable es que se mantenga tal como está”. Asimismo, considera que el hecho de no modificarlas puede ser un gesto para atemperar las expectativas inflacionarias de agosto.
No obstante, Ferrari apunta que, quizás, en esta oportunidad, el Bcra disponga una suba de la tasa del plazo fijo con el fin de dar una señal anticipada para frenar la migración al dólar. Pero Giorgi considera que las presiones dolarizadoras del mercado, en este momento, responden netamente a cuestiones electorales, dado que faltan pocos días para las Paso y que luego seguirán hacia octubre, por lo cual, indica que “difícilmente, la tasa pueda hacer algo para controlar la dolarización electoral”.
Plazo fijo: cuándo habrá novedades
Pero, tal como apunta el economista Federico Glustein, dado que el Bcra anuncia sus decisiones de política de tasas después de que se difunda el dato del IPC del Indec, esa decisión llegará recién post Paso, ya que el dato de inflación de julio se publicará el martes 15 de agosto y las elecciones son este domingo 13.
En ese escenario, considera que “no hay en el horizonte una posibilidad de hacer ese movimiento sin contar el resultado de las Paso y los movimientos que puedan surgir al respecto”. Así, Glustein traza dos caminos posibles:
“Si el mercado reacciona inocuo al resultado electoral, hay potencialidad para no modificar la tasa este mes dados los indicadores de inflación, que no revisten una aceleración en los últimos días y semanas”, describe, por un lado.
Y, por otra parte, menciona que, si el mercado reacciona, puede haber una eventual pequeña suba inflacionaria como producto de una aceleración del tipo de cambio y un traslado a precios que predomine el contexto macro. En ese caso, no descarta un ajuste en la tasa nominal del plazo fijo hacia adelante.