Decenas de miles de personas se manifestaron hoy en el centro de Hong Kong en una manifestación autorizada por el gobierno. Las masivas protestas comenzaron cuando el gobierno local intentó debatir y aprobar en el congreso una ley para facilitar la extradición a China.
La Policía hongkonesa informó esta madrugada que detuvo 20 manifestantes, pero aún no confirmó si los acusará de provocar una revuelta, un delito penado con entre cinco y10 años de prisión con el que procesó a 44 personas ya.
Decenas de miles de personas protestaron este domingo en el centro de Hong Kong en una manifestación autorizada por el gobierno y luego miles de ciudadanos se concentraron en otra parte de la ciudad autónoma china para continuar reclamando por una apertura democrática, pese a las advertencias de la Policía de una nueva represión.
En el medio de estas protestas, cientos de jóvenes caminaron hasta la comisaría central de Hong Kong y tiraron ladrillos y huevos contra los vidrios del edificio, hasta que la Policía salió y les dio una advertencia.
Los manifestantes aceptaron retirarse pero solo hasta el barrio Kennedy y la Bahía Causeway, donde miles ya comenzaban a concentrarse para una nueva protesta contra un proyecto de extradición ya anulado, el gobierno local de Carrie Lam, la dura represión policial y de mafias pro oficialistas de las últimas semanas y en favor de una mayor autonomía de China que permita una plena democracia.
Al caer la noche, la Policía volvió a reprimir con gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes que, pese a ello, intentaron mantenerse en las calles.
En 1997, el Reino Unido devolvió el control de Hong Kong a China, pero solo bajo el compromiso de que Beijing aceptara un período político de transición, que significó que hasta 2047, la región goza de cierta autonomía, que gradualmente se va achicando hasta fusionarse con el sistema político chino.
Las masivas protestas en Hong Kong comenzaron cuando el gobierno local intentó debatir y aprobar en el congreso una ley para facilitar la extradición a China, una iniciativa que se enmarcaba en esta transición gradual que terminará en 2047.
Lam finalmente dio "por muerto" este proyecto de ley, pero las protestas continuaron y crecieron y comenzaron a pedir la renuncia del gobierno local y una mayor autonomía frente a Beijing.
Frente a uno de los escenarios que montaron los manifestantes en la protesta de la mañana podía leerse una gran pancarta con ocho caracteres chinos que prometía: "Nos hacemos cargo de Hong Kong mañana".
"Sólo soy un ciudadano común de Hong Kong. Es el gobierno de Hong Kong respaldado por el PCCh (Partido Comunista Chino) lo que me obliga a salir. El gobierno es el culpable de todos los conflictos recientes", denunció uno de los manifestantes desde el escenario y pidió a la agencia de noticias EFE que lo identifique solo como Coco.
Ayer las manifestaciones masivas de la noche terminaron otra vez en caos, represión y detenciones.