La Universitat Politècnica de València, a través del Instituto de Ciencia y Tecnología Animal (Icta) (España), es uno de los participantes del proyecto Bovigreen, cuyo objetivo principal es reducir la huella ambiental de la carne de bovino que llega al consumidor. Para conseguirlo, Bovigreen plantea identificar e incentivar aquellas estrategias tanto en granjas y mataderos, como en el proceso de distribución, que permitan reducir la huella medioambiental de las explotaciones de bovino de carne. Todo ello teniendo en consideración los diferentes impactos ambientales, económicos y sociales asociados a la producción de esta carne.
El Icta de la UPV participa en este proyecto aportando su experiencia en ganadería y medio ambiente. Salvador Calvet, coordinador del equipo de trabajo, es presidente de la asociación científica Red Remedia (Red Científica de Mitigación del Cambio Climático en el Sector Agroforestal) y ha participado en el grupo focal europeo de EIP-Agri sobre reducción de emisiones del ganado.
“La producción bovina se enfrenta a importantes retos derivados de sus propios impactos ambientales y de la percepción negativa de estos impactos por parte de la sociedad. El sector es consciente de estos retos, y pretende mediante este proyecto adelantarse a un posible escenario en el que los productos agroalimentarios estén sujetos al ecoetiquetado”, explica Salvador Calvet.
La principal tarea de los investigadores de la UPV en el proyecto es identificar propuestas que mejoren la productividad y a la vez reduzcan la huella ambiental. Según apuntan desde el Icta, el consumidor debe conocer que la producción bovina ha mejorado mucho en los últimos años, “sin embargo, existe aún un importante margen de mejora en las granjas bovinas que se debe aprovechar. Estas mejoras se centran en el manejo del ganado y de su alimentación, haciendo uso de las nuevas tecnologías en la medida en que estas puedan implantarse en granja, y favoreciendo el reciclaje de nutrientes y la economía circular”, añade Calvet.
Los resultados que se pretenden alcanzar son la definición de un set de indicadores económicos y sociales y la aplicación del mismo en una muestra de explotaciones para identificar las principales medidas que conlleven a una mejora de la sostenibilidad y una mejor comunicación a la sociedad.
Los socios del proyecto han formado un Grupo Operativo, que está liderado por Asoprovac. En él, además de la Universitat Politècnica de València participan otras empresas como la Fundación Empresa y Clima (FEC), Novadays, consultoría e investigación; el Centro Tecnológico Neiker-Tecnalia, la Sociedad Pública de gestión ambiental del Gobierno Vasco (Ihobe) y la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice).
Los Grupos Operativos son la fórmula propuesta por la Comisión Europea para promover la innovación en materia de agricultura productiva y sostenible, resolver problemas concretos o aprovechar oportunidades. Son agrupaciones de actores de distintos perfiles, tales como productores, industrias agroalimentarias, centros tecnológicos y de investigación o instituciones sin fines de lucro.
Estos proyectos se enmarcan en el Programa Nacional de Desarrollo Rural 2014-2020, que son cofinanciadas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (Mapa) en un 47 por ciento y por el Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (Feader) en un 53 por ciento. El proyecto Bovigreen cuenta con una subvención de 53.640 euros .
Fuente: UPV.-