Aeronavegantes elaboraron un plan de lucha en rechazo a la privatización de Aerolíneas Argentinas y en contra de la política de "cielos abiertos".
Uno de los gremios que enfrentó la gestión de Javier Milei casi desde sus inicios fue la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) en rechazo a la privatización de Aerolíneas Argentinas y contra la vuelta de la política de "cielos abiertos" que en se implementó en tiempos de Mauricio Macri en la Casa Rosada.
Frente a este panorama, una asamblea extraordinaria facultó a la comisión interna del gremio a elaborar un plan de lucha, por lo que se estima que, a la brevedad, habrá protestas que afecten o paralicen el servicio aéreo de pasajeros.
Las medidas de fuerza fueron avaladas "ante el complejo escenario que se encuentra atravesando nuestro sector y, particularmente, nuestra aerolínea de bandera". En la asamblea, el secretario General Juan Pablo Brey, realizó un detallado análisis de coyuntura política, económica y social, concentrándose en los alcances del complejo panorama que enfrenta el sector.
Fuentes gremiales apuntaron que "en los encuentros con las autoridades empresariales como con las gubernamentales venimos planteando nuestras demandas y la necesidad de consolidar Aerolíneas Argentina, pero las respuestas no son las que esperamos".
La asamblea, entonces, dispuso el "estado de asamblea permanente". Al respecto, Brey expresó: "Sin lugar a dudas, nos encontramos viviendo un momento de suma gravedad. La realidad se impone y demanda de nosotros un altísimo grado de unión para dar fortaleza a nuestro sindicato".
La organización gremial viene cuestionando la gestión libertaria desde la publicación del DNU, señalando que "se trata del más grave atropello a la Constitución Nacional y a la división de poderes desde la recuperación de la democracia". Agregó que Milei "se arrogó facultades propias de sistemas de gobierno absolutistas y totalitarios" y que pasó "absolutamente por encima a los poderes legislativo y judicial" al resolver "unilateralmente la eliminación de trascendentales derechos, tanto laborales como de carácter social, cultural y ambiental".
Brey afirmó que "el Decreto arrasa con más de un siglo de conquistas y derechos de los trabajadores, dejándolos librados a su suerte ante el mercado, provocando una relación de fuerzas tan dispar por naturaleza", la cual "queda ahora validada en ese sentido por un decreto presidencial".
Destacó que "la modificación del Código Aeronáutico y la implementación de la política de Cielos Abiertos es la amenaza más directa a nuestras fuentes de trabajo que hayamos enfrentado" y añadió que "la apertura del mercado doméstico a líneas aéreas extranjeras, con personal extranjero, es el camino directo a la destrucción de la industria aerocomercial argentina tal como la conocemos".
No a la política de "cielos abiertos"
Brey recordó que "esta política predatoria ya fue impuesta en países como Chile, Perú y Ecuador, teniendo como resultado la más absoluta precarización y flexibilización de nuestra actividad" y avisó que "los países económicamente más desarrollados, por el contrario, protegen fuertemente a sus aerolíneas y la soberanía de sus cielos".
Advirtió que "la virtual eliminación de las indemnizaciones por despido, el aval tácito al trabajo no registrado o precarizado, o el ataque a sindicatos y obras sociales, son sólo algunos títulos que deja esta escandalosa medida" y que "el fin de la ultractividad de los convenios colectivos de trabajo (CCT) implica directamente la caída de los mismos, con todos nuestros derechos adentro".
Volviendo a la situación de Aerolíneas Argentinas, Brey indicó que "tampoco pudo escapar de la ofensiva ante un Estado que no sólo se aparta por completo del rol que debe cumplir como regulador y garante de la equidad en las relaciones entre la sociedad, sino que resigna por completo las ideas de Soberanía Nacional e impulsa abiertamente la entrega de nuestras tierras y recursos naturales al mejor postor".