Miles de personas se manifestaron en el centro de Madrid a favor de la autoderrminación catalana y en contra del juicio que se sigue contra 12 independendistas catalanes en la capital de España.
El presidente de Catalunya, el independentista Quim Torra, miembros de su gobierno y de partidos independentistas participaron de las protestas, que fueron convocadas por 60 agrupaciones republicanas, antifascistas y soberanistas bajo el lema “elegir no es delito” “democracia es decidir”.
Para el partido de derecha que debió salir del gobierno, el Partido Popular, la manifestación fue una “horda” y acusó al gobierno de Pedro Sánchez de querer convalidar una presunta alianza con los soberanistas catalanes.