Docentes y estudiantes de los Polos de Reingreso, Centro de Actividades Juveniles (CAJ) y Centro de Actividades Infantiles (CAI) marcharon este lunes al Consejo General de Educación (CGE), para reclamar la permanencia de los dispositivos socioeducativos el año próximo, informaron a AIM.
La movilización fue al Consejo General de Educación (CGE) “donde se entregó un petitorio firmado por delegados, trabajadores de la educación, coordinadores, talleristas y alumnos, para que el Gobierno de la provincia garantice la continuidad de los Polos de Reingreso, CAJ y CAI”, indicó a esta Agencia el secretario adjunto de Agmer Paraná, Claudio Puntel.
Precisamente demandan que el Gobierno de Entre Ríos “garantice la continuidad de cada uno de los programas, dispositivos y actividades, propiciando la recuperación de los que se perdieron producto del recorte presupuestario; que garantice las condiciones regulares de contratación, trabajo y salario, con el principio de igual salario para igual trabajo; que se terminen las condiciones de irregularidad y precariedad laboral; que se garantice en tiempo y forma las partidas presupuestarias y recursos necesarios para cada una de las actividades; y que se regularice el pago del salario atrasado, varios de ellos, inclusive, del 2017”.
“Reclamamos que la provincia enfrente a la Nación y exija que se cumpla con lo presupuestario para la continuidad de estos dispositivos y actividades curriculares o que el Gobierno incluya en el Presupuesto provincial partida para que esto continúe, no solamente los que están en este momento sino que se recuperen los que se cayeron”, subrayó Puntel.
Espacios de contención y recuperación de trayectorias escolares
La Asamblea de Delegados de Agmer Paraná con talleristas, coordinadores, docentes, tutores de CAI y CAJ, Polos de Reingreso y PMI ven con “enorme preocupación cómo la precarización laboral, las condiciones de contratación, la política salarial y la falta de garantías por parte de los Estados (provincial y nacional) pone en riesgo la continuidad de la totalidad de los programas, dispositivos y actividades y vulnera los derechos laborales”.
“Mucho más preocupa cómo esta situación atenta gravemente contra la educación pública y las necesidades de las comunidades educativas que, a lo largo del tiempo, esta situación de precarización llevó a la renuncia de muchos trabajadores y la pérdida de varios centros de actividades en escuelas que lo necesitan cada vez más”, indicaron. En ese marco, apuntaron que “en muchos casos no permitieron que los trabajadores sean reemplazados”.
La profundización de la crisis social “hace que se incremente la demanda de los dispositivos y talleres con mayor urgencia”, destacaron los docentes, quienes remarcaron que las experiencias en las comunidades educativas, donde funcionan y funcionaron estos programas, dispositivos y actividades, son positivas, destacándose los enormes logros de haber recuperado para la escuela pública a estudiantes que habían desertado, mejorando su trayectoria escolar y el mayor compromiso con su desarrollo educativo.
Además, subrayaron lo que se logró con la ampliación y revitalización de espacios escolares, mejorando el vínculo y compromiso con la comunidad. Varios de los centros y polos tienen una trayectoria de muchos años; “en este tiempo el interés de los gurises y la comunidad sigue creciendo”.