Desde la Federación Nacional Campesina de La Paz, Entre Ríos, manifestaron las vicisitudes por las que atraviesan a partir de los recortes de programas desde el Gobierno nacional. “Las familias campesinas que recibíamos a través del Inta las semillas para la producción de nuestras huertas hoy no tenemos el acceso a eso”, dijo a AIM la referente del sector, Karina Méndez.

“La situación que hoy estamos pasando por los recortes de los diferentes programas que hemos tenido es crítica en el medio rural. Las familias campesinas que recibíamos a través del Inta las semillas para la producción de nuestras huertas hoy no tenemos el acceso a eso, tampoco al compañero e ingeniero Pablo Benetti que trabajaba para la Secretaría de Agricultura Familiar y que fue despedido a principios de año. Hoy no contamos con el apoyo y asesoramiento de un técnico”, explicó Karina Méndez a esta Agencia.

“Se recibieron los fondos de la emergencia agropecuaria por la sequía del 2023 y el productor quedó a la deriva, debido a que no teníamos un técnico territorial que nos asesore. Sí el compañero Pablo Benetti no nos soltó la mano, nos asesoró y trabajamos en conjunto con comunas para poder ayudar al productor a resolver esta situación de la presentación en tiempo y forma de la rendición de los fondos recibidos”, señaló.

En la actualidad “estamos pasando una situación crítica que en el medio rural se nota mucho, hay sequía nuevamente y los pronósticos no son muy alentadores, sabemos que otra vez vamos a tener problemas con ella. No tenemos hoy un técnico en la Secretaría de Agricultura Familiar que nos represente en el caso de que se apruebe otra emergencia”.

En el medio rural, relató Méndez, “está difícil la situación, más allá de que por ahí el hombre consigue una changa, nosotras como mujeres campesinas no tenemos salida laboral en el medio rural, se nos complica un montón, ni hablar las que tienen más de dos o tres chicos, hoy una tarjeta Alimentar y una asignación no sustentan la olla del día a día. Se te enferma un chico en el medio rural y no todos contamos con un vehículo, estamos a más de 50 kilómetros de la ciudad y pagarle a alguien nos sale 40 mil pesos para ir a un hospital, es inalcanzable para una familia en el campo”.