Una profesora de 23 años y un alumno de 14 años abandonaron la relación pedagógica, formalizaron una relación de pareja y tuvieron una hija en Palmira, Mendoza. Pero la docente fue denunciada por estupro por el padre del menor y debió pasar ocho meses de prisión.
Ya separada de su ex alumno y con hija a su cargo, tuvo que cumplir 8 meses de prisión domiciliaria, hasta que hace unos días fue absuelta. “Quedó probado que no existió, por parte de la maestra, un aprovechamiento de la inmadurez sexual del menor, situación que es penada por el artículo 120 del Código Penal”, confirmó el fiscal de la causa, Oscar Sívori.
Todo comenzó en 2015. El chico tenía dificultades en el colegio y sus padres lo mandaron a una profesora particular, una joven de 23 años recién recibida e hija de un matrimonio amigo. En este contexto, la mujer y el adolescente comenzaron una relación. Los nueve años de diferencia no impidieron que se enamoraran. La relación, en un principio oculta, comenzó a crecer.
El chico le contó a una persona mayor de su familia y este lo alentó a continuar”, detalló el fiscal. Luego de unos meses, la profesora quedó embarazada y decidieron irse a vivir juntos para esperar el nacimiento de su hija, que ahora tiene dos años. El año pasado, la pareja comenzó a tener problemas hasta que se separaron. Ahí la historia llegó a la Justicia. El padre del menor denunció a la madre de su nieto por estupro.