Ingresó un proyecto de Ley en la Cámara de Diputados por el que se pretende equiparar las licencias por maternidad y paternidad sin distinción respecto al origen de la filiación de los hijos e hijas, procurando abarcar las diversas constituciones familiares, en el marco de la ley de matrimonio igualitario, a la ley de identidad de género, los casos de adopción y hogares monoparentales, confirmó AIM.
La iniciativa tomará estado parlamentario en la próxima sesión de la Cámara de Diputados. El objetivo es “equiparar las licencias por maternidad y paternidad sin distinción de sexo ni orientación sexual del o la trabajadora beneficiaria”, según indicó en los fundamentos del proyecto el diputado José Kramer.
En ese sentido, precisó que en Argentina, “la actual diferencia entre las licencias por maternidad y paternidad reproduce estereotipos de género e invisibilizan la diversidad de las constituciones familiares, constituyendo un obstáculo para el acceso, permanencia y desarrollo de las mujeres en mercado laboral en condiciones de igualdad”.
En el país la Ley 20744 de Contrato de Trabajo establece 90 días de licencia por maternidad y 2 de licencia por paternidad para empleados privados. A su vez, el convenio colectivo de trabajo de cada actividad puede modificar esas cantidades. Para la administración pública nacional, la Ley 25164 dispone una licencia por maternidad de 100 días, mientras que el decreto 214/2016 otorga una licencia por nacimiento de 15 días hábiles para la persona no gestante.
En Entre Ríos, el Anexo I del Decreto 5703/93, que modifica la Ley 3289 “Régimen Jurídico de los Agentes públicos de la provincia de Entre Ríos” prevé una licencia por maternidad de 90 días corridos (estableciendo igual plazo aún en casos de alumbramiento múltiple) y una licencia diferenciada para el agente de 2 días hábiles por nacimiento de hijo. “Estas normativas distribuyen los tiempos de licencia en función de roles de género históricamente naturalizados: ellas como cuidadoras del hogar y los/as hijos/as; ellos como sostenimiento económico de la familia”, indicó el legislador, quien agregó que el actual esquema “no tiene en cuenta las diversas constituciones familiares; no está adaptado a La Ley de Matrimonio Igualitario ni a la Ley de Identidad de Género, no considera los casos de adopción, ni la existencia de hogares monoparentales”.
Al respecto, consideró que la asunción de la responsabilidad de los hombres en las tareas de cuidado, “es ciertamente un aspecto relativamente reciente, que requiere de su visibilización y de su estímulo tanto en las políticas públicas como en las Leyes, en especial, en las normas que regulan la vida laboral de varones y mujeres. Históricamente, los varones han estado inhabilitados, tanto por auto-imposición como desde la misma sociedad patriarcal, para ejercer labores consideradas como ‘femeninas’”.
Precisamente para Kramer las licencias familiares “deben ser concebidas como políticas públicas destinadas a garantizar derechos y promover el desarrollo y para ello, es necesario universalizar su acceso y promover una división más justa de las tareas de cuidado”.