La señora sacó su reposera y se instaló en el césped cerca de Avenida Libertador. La policía discutió con ella, para convencerla de volver a su casa. "Colaboren conmigo, que soy una vieja que necesita aire y vitamina D", decía la mujer.
Una señora que salió a tomar sol en una plaza de Palermo, en la ciudad de Buenos Aires, se resistió al pedido de la Policía de regresar a su casa en medio del aislamiento obligatorio por la expansión del coronavirus en la Argentina. "Colaboren conmigo, que soy una vieja que necesita aire y sol. No estoy contagiando a nadie", le dijo al oficial que le notificó que estaba incumpliendo la cuarentena.
El episodio ocurrió este martes por la tarde, cuando una mujer se trasladó con una reposera a una plaza ubicada en la zona de Palermo.
La Policía llegó al lugar unos minutos después y le pidió a la mujer que regresara a su casa, ya que estaba incumpliendo el aislamiento obligatorio decretado por el Gobierno ante la pandemia de coronavirus. "Déjeme hasta las 15:20, sea bondadoso, no estoy jorobando a nadie", pidió.
Media docena de oficiales estaban alrededor de la mujer que vive por esa zona y aún no se conoció la edad, solicitándole que volviera a su hogar. Ante la negativa, los agentes de seguridad tuvieron que consultar con una fiscalía de turno para decidir si escoltarla o sancionarla.
No obstante, la señora de nombre Sara, que había llegado cerca de las tres de la tarde de este martes a la zona en cuestión, pidió que la dejaran tomar sol por su salud hasta las 15:20.
Antes de que hubiera una respuesta de la fiscalía y que el caso terminara con un acta por violación de la cuarentena, la mujer se levantó y se fue a su domicilio de nuevo.
Finalmente, tal como le había advertido a los policías, la mujer levantó sus pertenencias y se retiró del lugar a las 15:20.