En medio de un caos en la Legislatura santafesina, se aprobó la reforma previsional que impulsa el gobierno de Maximiliano Pullaro. Manifestantes intentaron ingresar por la fuerza al edificio legislativo, enfrentándose con las fuerzas de seguridad.
La tensión y el caos se apoderaron de la Legislatura santafesina, mientras la Cámara de Diputados de Santa Fe se disponía a convertir en ley la reforma previsional impulsada por el gobierno de Maximiliano Pullaro. La iniciativa, que busca reducir el déficit de la Caja de Jubilaciones de Santa Fe, generó una fuerte oposición por parte de diversos gremios. La sesión pasó a un cuarto intermedio debido a los incidentes que se registraron durante la votación.
El proyecto se aprobó en general y la oposición se retiró. La votación resultó con 23 positivos, nueve negativos y 11 abstenciones. Además, hubo seis ausentes.
Mientras tanto, en la puerta de la Legislatura se producían incidentes con los manifestantes que arrojaron piedras y quería abrir las puertas del edificio. Es que, desde horas tempranas, empleados públicos nucleados en distintos sindicatos comenzaron a concentrarse y la tensión era palpable: con pancartas en mano, cánticos de protesta y el sonido incesante de bombos, los grupos expresaban su rechazo a lo que consideran un ataque a los derechos de los jubilados y trabajadores. La situación se tornó aún más crítica cuando, en medio del fervor y la indignación, algunos manifestantes intentaron ingresar por la fuerza al edificio legislativo, enfrentándose con las fuerzas de seguridad.
El clima se volvió más violento cuando comenzaron a volar piedras y palos, publicó Uno Santa Fe. En el fragor de la protesta, algunos manifestantes lanzaron objetos contundentes contra la fachada de la Legislatura y los efectivos policiales que custodiaban la entrada. Los agentes, en respuesta, reforzaron su presencia con equipos antidisturbios, lo que tensó aún más el ambiente.
Así comenzaron los incidentes en la Legislatura
La jornada había comenzado con polémica a partir de la decisión del Ministerio de Seguridad de sitiar las inmediaciones de la Legislatura con un fuerte operativo que incluyó casi 200 agentes y la colocación de vallas antitumultos. A partir de las gestiones de los legisladores, fueron retiradas del lugar.